*Los favoritos para el título, aun con sus derrotas, son los mismos de siempre.
De la redacción
De acuerdo con una encuesta de “El Espectador” entre aficionados del fútbol mexicano, un alto porcentaje se siente decepcionado por el bajo nivel de los partidos jugados en las dos primeras fechas.
Así comienzan siempre las competencias de la Liga MX, y en ocasiones el bajo nivel de los juegos continúa durante las 17 fechas regulares, para mejorar ya en las fases de repechaje y liguilla.
No obstante, ahora los malos encuentros se notan más porque está fresca en la memoria de los aficionados al balompié la calidad de los partidos del Mundial Qatar 2022, concluido apenas en diciembre.
Toman como referencia esos partidos de la justa mundialista; sobre todo, los de octavos, cuartos, semifinales y final, que tuvieron alta calidad y de muchas emociones, por lo que los que estamos presenciando en el torneo nacional parecen más malos de lo que son.
FAVORITOS PARA EL TÍTULO, LOS MISMOS
Con un mal comienzo, América y Monterrey, de todos modos figuran en el grupo de equipos que siempre parten como favoritos para ganar el título, lo cual pocas veces justifican al final.
En los tres últimos torneos esos clubes considerados “grandes” no han llegado ni a la final, pero por sus caras nóminas de jugadores siempre se espera que algunos de ellos se alce con la corona del futbol mexicano.
Mejor, cuando nadie lo esperaba, el Atlas dio la sorpresa ganando un título y más grande fue la sorpresa cuando ganó el bicampeonato, después de décadas de sequía en este tema, pues sus seguidores jóvenes no lo habían conocido como campeón.
De cualquier manera, a pesar de lo ocurrido en varios torneos, todavía un alto porcentaje de los entrevistados consideró que de entre América, Tigres, Cruz Azul, Monterrey y Pachuca saldrá el próximo campeón de la Liga MX.
Todos tienen buenos jugadores, pero salvo Pachuca, cuya nómina no está entre las más altas, ni tiene grandes figuras, los futbolistas de los siempre favoritos no acreditan en las canchas sus altos salarios.
Sus clubes no les sacan provecho en el juego colectivo, ni en el individual de sus estrellas, por lo que tal vez debería abandonarse esa percepción de que son equipos grandes y favoritos a ganar los torneos.