*El porcentaje de problemas entre toluqueños, mayor a la media nacional.
De la redacción
La Encuesta Nacional de Seguridad pública Urbana (ENSU) del INEGI, correspondiente al cuarto trimestre del año pasado (octubre-diciembre), arrojó resultados para el Estado de México que deben ser atendidos por las autoridades y no tomarlos como simple información estadística.
En especial es preocupante el alto índice de conflictividad entre ciudadanos y ciudadanos pacíficos(as), muy superior a los de ciudades de otros estados de la República, aun sobre los que registran en forma cotidiana alta violencia de los grupos de la delincuencia organizada.
En percepción de inseguridad pública de la población de 18 años y mayores las ciudades mexiquenses tienen altos índices: Naucalpan, 89.7 por ciento; Ecatepec, 89.6; Cuautitlán Izcalli, 83.5; Toluca, 83. 8; Chimalhuacán, 81.3; Tlalnepantla, 77.4; Nezahualcóyotl, 72.5; y Atizapán de Zaragoza, 61.3 por ciento.
Para entender lo que esto representa, es necesario recordar que la media nacional de percepción ciudadana de inseguridad pública es de 64.2 por ciento, por lo que la porción de los mexiquenses de 18 años y más que sale con miedo a las calles en Naucalpan y Ecatepec es 24 puntos porcentuales más que el promedio del país.
En este aspecto, las ciudades mexiquenses incluidas en la ENSU tienen mayores índices que Tijuana, Chihuahua, Ciudad Juárez, Acapulco y Chilpancingo, donde con frecuencia se registran masacres.
Lo mismo ocurre en los problemas entre vecinos, compañeros de trabajo, de estudios y con autoridades. Las urbes del Estado de México tienen mayor porcentaje de este tipo de problemas que las ciudades de otras entidades federativas, incluyendo a las que registran muchas muertes violentas intencionales.
La rijosidad de los habitantes de las ciudades del Estado de México, expresada en conflictos con vecinos, familiares, compañeros de trabajo, de escuelas y autoridades es muy alta, y se trata de problemas de la población pacífica.
Hay un porcentaje menor de rijosidad entre conocidos en Tijuana, Chihuahua, Ciudad Juárez, Irapuato, Ciudad Obregón, Chilpancingo y Acapulco, donde hay alta violencia asesina, que en las citadas ciudades mexiquenses.