*Tres millones de mexiquenses más, como todos los de Sinaloa, en 16 años.
De la redacción
El Programa de Ordenamiento Ecológico Estatal quedó rebasado por la realidad, a 24 años de entrar en vigor; sobre todo, ante los cambios del clima global y el crecimiento demográfico.
Integrantes de las comisiones legislativas de Protección Ambiental y Cambio Climático, Legislación y Administración Municipal destacaron esta realidad, al anunciar la organización de mesas de análisis para la iniciativa de ley sobre la materia presentada por el gobernador Alfredo del Mazo.
En los 24 años de existencia del Programa de Ordenamiento Ambiental sólo se le hicieron algunos cambios hace 17 años, por lo que no tiene utilidad para encausar el combate al cambio climático global.
En su tiempo de vigencia la población mexiquense creció mucho y dio lugar a la expansión urbana, impactando negativamente las condiciones ambientales del Estado de México, advirtieron los diputados miembros de las comisiones.
Como ejemplo de la nueva realidad demográfica, destacaron que de 2006 al 2022 cerca de 3 millones de mexiquenses se agregaron a la población, que ahora se acerca a los 18 millones.
De acuerdo con un análisis comparativo de “El Espectador”, los nuevos pobladores que se asentaron en el territorio estatal son tantos como los habitantes totales de Sinaloa o Sonora y más que los de Hidalgo.
El aumento demográfico se tradujo en presiones sobre los servicios públicos, especialmente sobre la disponibilidad del agua potable y su uso irracional, alertaron los diputados locales responsables de las comisiones especializadas en los temas de cambio climático y protección ambiental, legislación y administración municipal.
Uno de los objetivos más importantes de la nueva adecuación del Programa será alinearlo a las acciones que el país debe ejecutar en el marco de sus compromisos con los esfuerzos por frenar y revertir el cambio climático global.
Debe atender también la explotación irracional del agua potable por parte de la industria pesada que opera en el Estado de México y las empresas que sobrexplotan agua subterránea con fines de comercio; es decir, el agua como mercancía.
En recorrido de “El Espectador” por municipios de los valles de México y Toluca, el Programa de Ordenamiento Ecológico estatal, lo mismo que el Plan de Desarrollo Urbano, son letra muerta.
Las autoridades municipales y estatales no los han hecho valer. Aquí mismo en Toluca hay grandes construcciones en zonas prohibidas, sin respetar los usos de suelo, inclusive por tráfico de influencia y corrupción se permite construir edificios de varios pisos en áreas naturales protegidas.