COORDENADAS POLÍTICAS
MACARIO LOZANO R.
DESCOMUNAL Y RIESGOSO RETO DE IEEM Y TEEM;
QUITAR PRECAMPAÑAS Y EL REPARTO DE VOTOS
(Primera parte)
El IEEM y TEEM enfrentan el mayor y más delicado y riesgoso reto de su historia en el actual proceso para elegir titular del Poder Ejecutivo, por los muchos y poderosos intereses de todo tipo en juego, los cuales han sido examinados en este espacio y que nunca habían estado en peligro real de ser afectados como hoy.
En este escenario, las autoridades administrativas y jurisdiccionales no pueden fallar; sobre todo, porque expertos en elecciones mexiquenses sostienen que ambas instituciones siempre han servido al gobernador en turno y al PRI. De responder a la realidad, eso fue antidemocrático, pero cuando el tricolor no enfrentaba riesgos de perder y la oposición no disponía de posibilidades de ganar, la situación no era delicada, como lo es en la actualidad.
La tranquilidad, paz social, estabilidad y gobernabilidad del Estado de México dependerá en mucho de que IEEM y TEEM actúen con absoluta imparcialidad, transparencia, estricto apego a la legalidad, aplicación de las normas comiciales; hacer lo contrario constituirá no sólo una ilegalidad, sino también una gran irresponsabilidad para con los intereses de los 18 millones de mexiquenses.
Después del proceso electoral el Poder Legislativo deberá reformar la legislación electoral, para perfeccionar el marco constitucional y legal, por ahora con muchas deficiencias, de las cuales citamos dos ejemplos: las precampañas y el reparto de votos. El próximo miércoles 15 las coaliciones que encabezan Morena y el PRI deberán haber borrado toda la costosa propaganda de las precampañas de sus candidatas. No debe quedar una sola barda pintada con leyendas alusivas a las precampañas. Se gastaron millones de pesos en esa propaganda pintada o pegada también autobuses, taxis, combis, urvan y autos particulares, y erogarán fuertes sumas para desaparecerla. Luego, el 3 de abril deben volver a pintarlas.
Este gasto irracional lo ocasiona la figura de precampañas, que en realidad son campañas legalizadas, pero no se acepta que lo sea. Esa figura debe desaparecer, y dejar sólo la de campañas, que abarque los dos meses actuales y el mes de precampañas; es decir, tres meses de campaña electoral, período que rige en la práctica. La figura de precampaña es una simulación, que cuesta y llega a la irracionalidad en materia de gasto y presuntos delitos electorales.
Al finalizar febrero las denuncias de este tipo presentadad por los partidos políticos ante el IEEM se aproximaban a cien, de las cuales entre Morena y PRI sumaron casi 80. Una abrumadora mayoría se relacionó con presuntas violaciones a la legislación electoral en período de precampañas, figura utilizada para hacer tareas de proselitismo disfrazado. Sin las mismas, no existirían las denuncias. Esa fase del proceso electoral no tiene justificación cuando hay una o un precandidato en los partidos, porque no tienen competencia doméstica. Las precampañas son legales, pero de facto son campañas, por lo que deben desaparecer y que las campañas sean de tres meses, en condiciones de igualdad. Gastar en pintar propaganda de precampaña y en quitarla, y luego volver a pintar en campaña es irracional.