COORDENADAS POLÍTICAS
MACARIO LOZANO R.
TOMANDO EN CUENTA LO MUCHO QUE SE JUEGA,
LA LUCHA POR LA GUBERNATURA ES PACÍFICA
El 4 de junio se efectuará la elección de gobernadora mexiquense, que es no sólo la más importante en la historia del Estado, sino también de todas las entidades federativas, por loque estará en juego. Desde un presupuesto sexenal cercano a los 2.3 billones de pesos, cargos públicos y de dirigencia partidistas, contratos diversos y la conducción de los destinos de una población de 17 millones de personas, mayor que la de países como Portugal, Suiza, Panamá, Cuba, Ecuador, Guatemala.
En estas condiciones, los partidos políticos y los intereses empresariales, políticos y geográficos participan de una u otra forma en la contienda que se desarrolla y está en su fase de campañas, entre lo que se considera la izquierda y la derecha mexiquense, representada por Delfina Gómez Álvarez, de Morena; y Alejandra del Moral Vela, del PRI.
Ambas se quejan de guerra sucia; sobre todo, la primera y de actos represivos de autoridades municipales, con incidentes de destrucción de propaganda y otros actos hostiles en contra de los activistas de la contraparte, lo que es tradicional desde siempre, inclusive cuando el PRI no corría riesgos deperder una elección por la gubernatura, porque la oposición era testimonial.
La verdad es que cuando ya transcurrió más de la mitad de las campañas electorales el roceso para ekegir gobernadora no ha rebasado los límites de la pasión partidista y se desarrolla con buen nivel de civilidad. No hay confrontación entre los agrupamiebtos partidistas que se disputan el cargo público más importante del Estado de México.
Esfuerzos por desprestigiar a la adversaria existen y seguirán, porque es mucho lo que estrá en juego en las urnas el primer domingo del próximo mes, como para esperar que no se presenten problemas como los que se denuncian. Lo importante es que se canalicen por las vías legales establecidas para ello y ante las instituciones especializadas en los asuntos administrativos y jurisdiccionales en materia comicial, y que no se recurra a las vías de ehchos.
Es deseable que prevalezca la responsabilidad hasta después de la jornada de votación y que el bando que pierda reconozca su derrota y el triunfo de la adversaria, por encima del legítimo, legal y explicable deseos de ganar la gubernatura. Es decir, se requerirá de un comportamiento democrático y responsable de la candidata que pierda, para evitar tensiones políticas, intolerancia y que se pierdan las condiciones para la convivencia armónica y civilizada de la población estatal después de pasadado el proceso e iniciado el el nuevo sexenio.
La solución a los numerosos y graves problemas del Estado exigirá mucho esfuerzo, eficacias, capacidad, honestidad, vocación de servicio e interés por servirle a la comunidad, pero también condiciones de estabilidad institucional, paz social, gobernabilidad y comportamiento responsanble de la comunidad del Estado de México, no debe olvidarse.