*El GEM obtuvo ingresos por 347 mmd, casi 27 mil mdp más a lo esperado. *Con el ingreso extra pudo duplicar las obras en el Estado, pero no lo hizo.
GABRIEL L. VILLALTA
El gobierno mexiquense, como ocurre año con año desde hace tiempo, obtuvo ingresos consolidados mayores a los previstos. Los excedentes se aproximaron a los 27 mil millones de pesos, lo cual le permitió igualmente gastar más de lo presupuestado, de acuerdo con el contenido de la Cuenta Pública estatal, correspondiente al año anterior.
La documentación sobre el comportamiento de los ingresos y el ejercicio presupuestal fue entregada al líder de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), Elías Rescala Jiménez, por el secretario de Finanzas, Rodrigo Jarquez Lira.
No obstante, la partida presupuestal destinada a impulsar el desarrollo y crecimiento económico y satisfacer las necesidades de obras y servicios de los cerca de 17 millones de mexiquense fue excesivamente reducida: 5.8 por ciento del gasto total, y fue menor a los ingresos excedentes, según el análisis de “El Espectador”.
Los datos relevantes fueron dados a conocer en la ceremonia de entrega, y de acuerdo con un análisis de “El Espectador”, los ingresos consolidados fueron superiores en 26 mil 761 millones de pesos a lo establecido en la Ley de Ingresos del año pasado, aprobada por la representación popular de la entidad.
Es decir, se trata de dinero que no esperaba el gobernado Alfredo del Mazo, y de libre disponibilidad, como se le dice técnicamente a los fondos estatales de los que el titular del Poder Ejecutivo puede decidir libremente y a discreción su destino.
De ese total una parte fue ejercida en los programas de trabajo, por ello el gasto se elevó a 338 mil millones de pesos, y todavía le sobraron al gobierno mexiquense cerca de 10 mil millones de pesos.
En contraste con el buen comportamiento de los ingresos públicos estatales, el gasto de inversión en obras de infraestructura para el desarrollo económico general del Estado de México y para servicios públicos fue por demás reducido.
En la cuenta pública se reporta un gasto de inversión de 24 mil 904 millones de pesos, pero incluye 4 mil 204 millones de pesos en inversiones financieras; es decir, depositados en bancos, no aplicados en obras públicas, que es la definición socialmente más precisa del gasto de inversión.
De los 24 mil 904 millones de pesos del gasto de inversión también deben descontarse 913 millones de pesos gastados en renta y compra de bienes muebles e inmuebles, por lo que el monto neto erogado en gasto de inversión apenas alcanzó los 19 mil 787 millones de pesos, de un gasto total de 338 mil millones de pesos.
El monto del gasto de inversión en obras de infraestructura para el desarrollo económico y para servicios públicos impresiona, pero lo cierto es que representa apenas el 5.8 por ciento del presupuesto total, porción por demás reducida en un estado con más de 17 millones de habitantes y grandes carencias de infraestructura.