*Individuos que vienen de fuera actúan cuando hay conciertos o fútbol.
De la redacción
Bandas de delincuentes, que operan como “franeleros” en Toluca, ejercen violencia contra propietarios de estacionamientos, a quienes en forma ilegal les disputan el negocio del cuidado de vehículos.
En esta capital mexiquense existen personas denominadas peyorativamente como “franeleros”, dedicadas a cobrar por el estacionamiento en las calles, pero aun cuando violan normas reglamentarias, no agredían a automovilistas, ni a dueños de estacionamientos.
El fenómeno tiene ahora una nueva vertiente, caracterizada por la agresividad de estos “franeleros”, se denunció en la novena sesión ordinaria del Consejo de Seguridad Pública Municipal de Toluca.
Un representante de los empresarios del centro de la ciudad denunció que se trata de personas que actúan como verdaderos delincuentes, pues perpetran verdaderas extorsiones contra dueños de vehículos, a quienes les cobran hasta 300 pesos por permitirles dejar en la vía pública sus unidades.
Esto ocurre cuando se efectúa eventos que concentran mucho público, como los conciertos de cantantes en el Teatro “Morelos”, y los partidos de futbol en el Estadio Nemesio Díez.
El problema ya se conocía, pero no se había denunciado públicamente ante el ayuntamiento, hasta ahora que en el citado Consejo de Seguridad Pública Municipal se trató abiertamente.
Y no sólo consiste en las extorsiones a conductores que tienen necesidad de dejar sus vehículos en las calles, sino que también ejercen violencia contra los dueños de los estacionamientos, para obligarlos a dejar de dar servicio en esas noches o días.
La situación llegó a tanto, que un grupo de “franeleros” llegó a golpear a un dueño de estacionamiento, en el interior de sus instalaciones. Así de violentos son estos individuos que explotan las vías públicas.
Otro empresario del ramo de estacionamiento se vio obligado a cerrar su negocio, por las amenazas de estos grupos, que no son de Toluca, sino de la Ciudad de México y municipios mexiquenses del Valle de México.
Están organizados y se presentan sólo cuando hay grandes eventos, a los que asisten muchas personas que se transportan en vehículos propios y son amenazados con que sus unidades serán dañadas si no les pagan por cuidarlas.