*Mala calificación del sistema carcelario del Estado de México.
De la redacción
Las autoridades estatales no pudieron contener ni erradicar la violencia el año pasado ni siquiera en sus centros de reclusorios, denominados eufemísticamente Centros Preventivos de y de Readaptación Social.
Durante el año pasado en el interior de las cárceles del Estado de México ocurrieron 23 muertes violentas, informó el diputado local Gerardo Ulloa Pérez, que citó información estadística del Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
De las 23 muertes violentas, 14 fueron intencionales; es decir, hubo intento de matar a los reos, mientras 9 fueron por mano propia; es decir, las víctimas atentaron contra sus vidas. Fueron suicidios.
Los 18 centros preventivos y de readaptación social albergan a una población de 34 mil 557 hombres y mujeres, y la violencia del 2022 incluyó 156 riñas en estos centros.
La parte del Diagnóstico Nacional 2022 de Supervisión de la CNDH correspondiente a la entidad mexiquense detectó que los organismos de derechos humanos recibieron mil 011 quejas por agravios a esos derechos.
Ulloa Pérez detalló de la supervisión se obtuvo información sobre el funcionamiento del sistema carcelario estatal, que recibió una calificación de 6.71 puntos, la cual es baja, no alta, como lo difundieron las autoridades estatales.
El Estado de México tiene la mayor población de personas privadas de la libertad (PPL) como se le denomina oficialmente a los presos, con 34 mil 557, seguido de la Ciudad de México, con poco más de 20 mil, y con una calificación de 6.92 puntos.
Los sistemas de prisiones peor calificados del país fueron los Tamaulipas, Hidalgo y Zacatecas, aunque tienen poblaciones presas mucho menores que la del Estado de México, según la información manejada por el legislador local. El primer estado tiene 4 mil 044 PPL, y recibió una calificación de sólo 4.26 puntos; Hidalgo, con 4 mil 785 reclusos y evaluación de 4.63 puntos; y Zacatecas, con una población carcelaria de 2 mil 352 presos y calificación de 4.7 puntos.
En la entidad mexiquense, el Centro Preventivo y de Readaptación Social de Tenango del Valle fue el mejor evaluado, con el 8.11 puntos, mientras los de Ixtlahuaca, con 5.31; y de Zumpango, con 5.74 puntos, los peores.
De los Centros Federales de Readaptación Social (CEFRESO), ubicados en Veracruz, Durango, Morelos, Nayarit, Sinaloa y Estado de México, todos tuvieron calificaciones superiores a 7.4, como fue el caso del que opera en territorio de Almoloya de Juárez, que recibió calificación de 7.42 puntos. El mejor evaluado fue el de Sinaloa, con 8.10 puntos.