*Los delanteros mexicanos siguen sin ser contundentes frente al marco rival.
De la redacción
La selección nacional de futbol tuvo un debut exitoso en el torneo Copa de Oro, al vencer por 4 goles a cero a la su similar de Hondura. También se inauguró con éxitos las nueva etapa del técnico interino, Jaime Lozano, quien relevó en el puesto a Diego Cocca.
El marcador abultado reflejó lo ocurrido en la cancha, pero también evidenció la falta de contundencia de los delanteros mexicanos, pues los goles no fueron anotados por Henry Martín, ni Santiago Jiménez quienes juegan esa posición. Dos fueron obra de Luis Romo; otro por Luis Chávez y el cuarto, por Orbelín Pineda.
El rival es débil, pero su defensa fue buena, a pesar de los 4 goles, pues evitó mucho más con oportunas intervenciones. Sus atacantes no inquietaron al portero mexicano Guillermo Ochoa. El primer disparo y flojo lo hicieron hasta el minuto 69, aunque también el equipo mexicano jugó bien y no les permitió que frente a la portería los ataques resultaran letales.
Sorprendieron las ganas de triunfar de los mexicanos, contrariamente a lo que mostraron en sus partidos anteriores, incluyendo los que dirigió Gerardo “Tato” Martino, lo cual hace pensar que frente a Estados Unidos jugaron mal deliberadamente, para deshacerse de Diego Cocca.
En el torneo de la Copa Oro mañana jueves México se enfrentará a Haití, otro equipo débil, pero eso es lo que hay, y de la fragilidad de los rivales no es culpable la selección mexicana. Además, estuvo jugando mal y en ocasiones no pudo ganarles a malas selecciones.
Los luises Romo y Chávez son de los mejores futbolistas que tiene México, y comprueban que hay madera para formar buenos jugadores y es necesario producir más como ellos.
