*El presidente señaló el otorgamiento de contratos millonarios, no el enriquecimiento, por ese monto.
De la redacción
Como que parece desventajoso para el presidente Andrés Manuel López Obrador el reto que le lanzó la senadora panista Xóchitl Gálvez, a quien el mandatario señaló por haber obtenido en los últimos años contratos con gobiernos y empresas particulares por mil 400 millones de pesos.
La legisladora hidalguense integra el grupo de 13 aspirantes a coordinar los trabajos de construcción del “Frente Amplio por México”, integrado por el PRI, PAN y PRD. Y ganar esa posición le representaría obtener de antemano la candidatura presidencial opositora el próximo año, para enfrentarse a quien gane la postulación de Morena.
Al conocer la información difundida por el presidente, la aspirante a relevarlo en el cargo le lanzó un reto claramente ventajoso para ella. Le dijo que si comprobaba que había tenido ingresos por mil 400 millones de pesos, ella renunciaba a la aspiración presidenciales, pero si no lo hacía, entonces que el mandatario renunciara a su cargo.
No se necesita mucha inteligencia para percibir que no hay proporción entre arriesgar una campaña para lograr una candidatura -la cual ni siquiera tiene garantía de ganar, pero en caso de obtenerla tiene pocas posibilidades de lograr la presidencia- y dejar la presidencia que el tabasqueño ganó con más de 30 millones de votos.
Por cierto, esa referencia a Xóchitl Galvez por parte del presidente López Obrador podría ser la última, porque el TEPJF ya le prohibió hablar de ella, sólo que esa resolución no le había sido notificada al mandatario y por eso pudo tocar el tema.
