*Se confirma paso a paso lo presagiado por el presidente López Obrador.
De la redacción
Las revelaciones del presidente Andrés Manuel López Obrador y del excoordinador de los senadores panista, Jorge Luis Preciado, en el sentido de que la ultraderecha empresarial ya había decidido que la senadora panista Xóchitl Gálvez sea la candidata presidencial de la oposición, se confirman paso a paso.
Ayer el Frente Amplio Opositor dio a conocer que sólo los panistas Xóchitl Gálvez y Santiago Creel, y los priistas Beatriz Paredes y Enrique de la Madrid reunieron las 150 mil formas de apoyo paar pasar a la siguiente fase del proceso para elegir coordinador de ese Frente. Fracasaron en su intento de seguir en la lucha por esa posición, que de facto equivale a la candidatura para la presidencia de la República, el ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México, senador perredista Miguel Ángel Mancera y su correligionario, Silvano Aureoles, exgobernador de Michoacán; y el exgobernador panista de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca.
Al parecer cumplieron con el requisito de las 150 mil firmas de apoyo, pero no con el de la dispersión. Esos electores deberían residir en al menos 17 entidades federativas. Como el cuento de los “perritos”, que fueron desapareciendo, hasta quedar uno, así en el Frente Amplio por México. Inicialmente se anotaron para competir por la posición 32 políticos de partidos y sin partidos, pero fueron abandonando la lucha por enterarse de que todo estaba decidido en favor de Xóchitl Gálvez, y que todo era una farsa.
Jorge Luis Preciado coincidió con el presidente López Obrador, en cuanto a que el proceso del Frente era una farsa. Abandonaron la lucha el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila, considerado por propios y extraños como el mejor prospecto opositor; los senadores Germán Martínez, Pablo Emilio Madero, Claudia Ruiz Salinas, Lily Téllez, los ex miembros de gabinetes presidenciales José Ángel Gurría e Ildefonso Guajardo, y ahora quedaron fuera los otros personajes mencionados.
Preciado, quien fue dirigente estatal del PAN en Colima, diputado local y federal y senador, no sólo renuncia a la lucha por la Coordinación del Frente Amplio por México, sino que renunció a su militancia de 29 años en el panismo, porque el proceso es una farsa, dado que todo está decidido en favor de la senadora Gálvez.