*Del Mazo sólo terminó uno de los diez nosocomios que inició, y tampoco terminó, Eruviel.
De la redacción
De los diez hospitales, cuya construcción inició el gobernador Eruviel Ávila Villegas, sólo uno, el más pequeño, pudo terminar en sus seis años de administración el gobernador saliente, Alfredo del Mazo Maza. Los otros nueve siguen inconclusos y en algunos casos abandonadas las obras, sin posibilidades de quedar listas en poco tiempo.
A esta situación obedece el retroceso en los servicios de salud para la población abierta mexiquense; es decir, para las familias excluidas del sistema de seguridad social, como el IMSS, ISSSTE o ISSEMYM y que acuden a atender sus enfermedades a los hospitales públicos púbicos dependientes del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).
Faustino de la Cruz, diputado local, atribuyó a este incumplimiento del programa de hospitales el aumento de la población sin acceso a los servicios de salud, que buscará revertir el próximo gobierno de Delfina Gómez Álvarez, que iniciará el 16 de septiembre de este año y terminará el 15 de septiembre de 2029.
La Legislatura Local aprobó partidas presupuestales para terminar los diez hospitales en distintas ciudades del Estado, pero los fondos no se aplicaron o no se ejercieron con eficacia, porque las obras del sector salud no se terminarán, a pesar de haberse iniciado hace más de una década, recordó el legislador.
Durante el sexenio de Eruviel Ávila Villegas el Instituto de Salud del Estado de México fue ejemplo de la conjugación de una serie de manejos presupuestales contrarios al interés de la población mexiquense más pobres. El abasto de medicamentos fue de apenas el 25 por ciento, se detectaron más de 6 mil “aviadores”, sin que se haya castigado a algún funcionario.
Los fármacos se compraron con sobreprecios, y el impuesto sobre la renta (ISR) descontado a los miles de empleados no se entregó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), y al final, como presidente de la República, Enrique Peña Nieto le perdonó al ISEM cerca de mil 200 millones de pesos de dicho gravamen no recibido por las autoridades fiscales federales.
El diputado Faustino de la Cruz dijo que los programas sociales federales permitieron reducir los índices de pobreza y pobreza extrema en el Estado de México, pero los hospitales no terminados afectaron a unos dos millones de mexiquense y se entregarán sin terminar el 15 de septiembre, cuando termine el sexenio de Alfredo del Mazo Maza.