*“Chino” Huerta y Jordi Cortizo pueden crecer; otros ya no o van en declive.
De la redacción
Un disparo horroroso de Roberto Alvarado, que pegó en un defensa y le quedó a Raúl Jiménez, quien sí anotó; otro mal remate de Uriel Antuna, como acostumbra hacerlos, rebotó en un defensa y se metió al marco de Uzbekistán, más una buena culminación de una jugada del mismo delantero del Fulham, permitió a México ponerse arriba 3 goles a 2, pero un grave error del portero Guillermo Ochoa, en un tiro de esquina, impidió la victoria y dio el empate 3 a 3.
Con este resultado del martes 12, obtenido en Atlanta, Georgia, la selección mexicana acumuló dos empates en la etapa de Jaime Lozano como técnico. Antes, en Arlington, Texas, igualó a dos con Australia, pero en ese partido lo iba perdiendo, pero hizo cambios que le respondieron y evitaron la derrota: César “Chino” Huerta y Jordi Cortizo.
El primer tiempo puso de manifiesto lo mucho que deberá trabajar el timonel para convertir al seleccionado en un grupo altamente competitivo, pues los jugadores se desenvolvieron en el desorden, la ineficacia, las fallas en la defensa, la media cancha y la delantera; es decir, en todas sus líneas.
Frente a Australia el desempeño fue tan malo que el primer tiro al marco lo hizo la selección mexicana hasta el minuto 36 del primer tiempo. Durante todo ese lapso no pudo armar una jugada de peligro en el marco rival, el cual parecían estar en una práctica con un equipo de sus fuerzas inferiores. La superioridad era manifiesta, como lo eran las fallas de los mexicanos, lo que permitió la anotación del primer gol del rival a los 15 minutos de iniciado el encuentro.
Los resultados, pero sobre todo, el desenvolvimiento de la selección evidenciaron la necesidad de que Lozano trabaje mucho para hacer crecer a los nuevos seleccionados, porque varios de los que tienen años en el equipo ya no se desarrollaron, y la mayoría de quienes fueron figuras en ligas europeas, ya dieron todo y casi nada pueden aportar a la selección.
El técnico tiene a su favor que México, como uno de los tres anfitriones del Mundial 2026, por lo que no necesita preparar un equipo para la eliminatoria, sino para hacer un buen papel en la competencia mundialista, y tiene tiempo para ello.
Ya no crecieron Antuna, Gallardo, Alvarado, Angulo, y parecen estancados algunos defensas, como se vio en los 5 goles que recibieron en dos partidos, y el mismo portero Ochoa tiene fallas que se convierte en gol, como el increíble que recibió en tiro de esquina. Él lo metió a su marco por un mal control del disparo.
A favor de la selección debe decirse que juega con ganas de triunfar, llega al área rival y no se arredran frente a rivales de mayor corpulencia y fortaleza física, como los de las dos selecciones con las que empató; no se dan por vencido, aunque vayan perdiendo y futbolistas como el “Chino” Huerta, Cortizo y varios más, pueden convertirse en grandes seleccionados. Lozano no debe dejarse intimidar por los intereses que se mueven en el futbol mexicano, ni por los nombres famosos que ya vieron pasar sus mejores épocas.