*Intereses económicos quebraron el sistema de salud en los estados.
De la redacción
Los servicios de salud para la población abierta de 23 entidades federativas; es decir, para la que no está protegida por los sistemas de seguridad social, fueron devueltos a la Federación, después de aproximadamente 4 décadas desde que fueron descentralizados mediante un convenio en los primeros años del sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado.
Por medio de un nuevo acuerdo, 23 gobernantes de igual número de estados, militantes de Morena, decidieron voluntariamente devolver más de 700 hospitales generales, incluyendo regionales, y 13 mil clínicas médicas y unidades de atención a la salud de los excluidos de los sistemas de seguridad social.
En nuestro país existen 65 millones de mexicanos en estas condiciones, quienes a partir de la de segunda mitad del próximo año dispondrán de servicios de salud de calidad, en instalaciones dignas, gratuitos y con medicamentos igualmente gratis, pero no sólo del cuadro básico, sino también para enfermedades graves.
Durante l acto de firma del citado acuerdo, el presidente Andrés Manuel López Obrador reveló que era muy difícil la situación en materia de servicios de salud para la población abierta en los momentos que se presentó la pandemia de Covid-19, porque faltaban instalaciones, personal médico y de enfermería, laboratorios, tomógrafos, quirófanos y medicamentos, además de 200 hospitales en proceso de ejecución, pero con los trabajos de construcción suspendidos.
Por si fuera poco, los poderosos intereses económicos protegidos por políticos influyente que controlaban la intermediación de medicamentos -en lo cual estaban involucrados medios informativos- desataron una feroz campaña de desprestigio contra el gobierno, basada en mentiras y atribuyéndole la culpa del desastre en que se encontraban los sistemas de salud.
A pesar de profesar el credo del neoliberalismo y del libre mercado, estos intereses distorsionaron las condiciones de la competencia económica y lograron que el Poder Legislativo hiciera reformas legales para prohibir la importación de medicinas. Crearon un mercado cautivo; sobre todo, en las ventas de fármacos al sector público, que mediante una desmesurada corrupción llegaron a vender medicinas con un sobreprecio del mil por ciento.
Los 23 gobiernos estatales comprometidos en el convenio entregarán a la federación de la infraestructura para brindar servicios médicos y el personal médico, de enfermería y de apoyo, además de la administración de esos más de 700 hospitales y 13 mil clínicas dispersadas en los 23 territorios, que de acuerdo con lo que se informó en la ceremonia de firma del acuerdo. Todo ello en beneficio del 80 por ciento de la población nacional que está excluida de los sistemas de seguridad social.