*También lo afecta su criminal e inútil bloqueo a Cuba, sin justificación.
De la redacción
Para entender la doble moral del gobierno estadounidense y las causas de su desprestigio mundial por su apoyo al genocidio que perpetra Benjamín Netanyahu en la Franja de Gaza, es cuestión de imaginar cómo reaccionaría si Nicolás Maduro bombardera a alguno de sus vecinos y asesinara a más de 11 mil inocentes, de los cuales cerca de 4 mil 500 mil fueran niños.
“Joe Biden no respaldaría esas atrocidades y llevaría a cabo una invasión militar, mucho menos entregaría un apoyo de 14 mil 500 millones de dólares en armamento a Venezuela para seguir masacrando, como lo hizo hace unos días con Israel”, ejemplificó el académico Samuel Larios Vallejo.
Reconoció que Hamás cometió masacres de israelíes inocentes, en un error y acciones claramente terroristas, pero aseveró que la represalia del gobierno de Netanyahu contra la población civil ajena a lo que hizo el citado grupo, “es un genocidio claramente tipificado por las leyes internacionales, apoyado o soslayado por las potencias occidentales, con Estados Unidos a la cabeza”.
El gobierno de Israel, con la repulsa mundial, como se comprobó en la ONU cuando se trató el problema, “ejecuta un terrorismo de Estado, al que agregó el corte de servicios vitales para los palestinos, como el suministro de agua potable, de energía eléctrica, de alimentos, de medicinas y los bombardeos, y no se diferencia del plan de exterminio de judíos por parte de Hitler”, abundó Larios Vallejo.
La deshumanización de la guerra, las violaciones a las leyes internacionales, incluyendo las propias de las guerras, el desprecio por la opinión pública mundial que exige desde hace días el cese de la matanza de civiles, incluyendo a los niños, pinta de cuerpo entero lo que es Benjamín Netanyahu, a quien respalda cínicamente el gobierno estadounidense, insistió el académico en temas internacionales.
El respaldo de Estados Unidos, recalcó el entrevistado, al genocidio contra los palestinos de la Franja de Gaza, “desprestigió a ese país y le restó autoridad para reclamar en el futuro el respeto a los derechos humanos en cualquier parte del mundo, porque se descalificó para ello, al no sólo dejar de condenar el exterminio de palestinos, sino también ofrecerle más armamento a Israel”.
El Estado israelí que ya de por sí tiene una aplastante superioridad en poder de fuego sobre el empobrecido pueblo martirizado, cuya ciudad de menos de 350 kilómetros cuadrados, ahora con amplias zonas habitacionales destruidas, junto con hospitales y otras infraestructuras, incluyendo hospitales, estará con mayor desventaja, comentó Larios Vallejo.
Se refirió en seguida al aislamiento de Estados Unidos en el tema del bloqueo económico, comercial y financiero a Cuba, que lleva 63 años y que ha ocasionado el sufrimiento de la población, con la condena mundial y exigencia de ponerle fin desde 1992 en la ONU, lo que ocurrió de nuevo hace días: “87 países votaron por terminar esa agresión no armada al gobierno y pueblo cubano. Sólo Estados Unidos e Israel votaron en contra, mientras Ucrania se abstuvo. Fue otra derrota diplomática”, concluyó el entrevistado.