*Eliminó en el Estadio Azteca a Honduras, pero llegó hasta los penales.
De la redacción
La selección mexicana de fútbol se vengó del 2 a 0 que le propinó su similar de Honduras en el país centroamericano. No obstante, en los 90 minutos de juego, apenas con angustia pudo igualar ese marcador, y empatar el global.Y hubo necesidad de jugar dos tiempos extras de 15 minutos cada uno y decir el pase al torneo de la Copa América, que se disputará en los Estados Unidos el próximo año.
El desempeño del representativo mexicano mejoró frente a su primer encuentro, uno de los peores en la época de Jaime Lozano, pero siguió con su problema de falta de contundencia. Generó varias oportunidades de anotar, pero las desperdiciaron sus delanteros y hasta los defensas. Hubo casos en que remataron con el marco abierto, pero sus disparos fueron a los lados y arriba.
A estas deficiencias se agregó una inexplicable suerte del portero hondureño Edrick Menjívar, que atrapó muchos balones que iban a gol, pero terminaban en sus manos sin esfuerzo alguno. La falta de contundencia de la selección mexicana fue tanta que ninguno de sus delanteros, incluidos los que entraron de relevo, pudieron anotar. Fue el medio Luis Chávez, quien a balón parado, cuando terminaba el primer tiempo, anotó un golazo, reviviendo las esperanzas de ganar y calificar.
Cuando ya faltaban 30 segundos para terminar el segundo tiempo y la selección mexicana estaba eliminada, un tiro del defensa Edson Álvarez, quien había fallado en tres ocasiones de anotar, logró enviar el baló a la redes de la portería rival. La suerte no estuvo esa ocasión con Menjívar.
Los mexicanos sufrieron por el mal juego y resultado obtenido en Honduras, porque iniciaron el partido en el Azteca con la obligación de anotar dos goles y no permitir uno sólo, pues de haber logrado un tanto el rival, los habría obligado a una ventajea de tres goles, sólo para empatar, y de 4 para triunfar.
Mientras la selección mexicana mejoró su desempeño en el Azteca, la de Honduras no pudo repetir el nivel de juego mostrado en su casa. Probablemente le afectó la altura de la capital del país, pero de todos modos en la cancha fue abrumado por el dominio del seleccionado anfitrión.
Así México vengó la derrota y se salvó del ridículo a segundos de finalizar el segundo tiempo extra y perdía por dos goles a uno. No obstante, debe preocupar la falta de contundencia de los delanteros; sobre todo, si se toma en cuenta que Jaime Lozano alineó a los mejores seleccionados, incluyendo al nacionalizado Julián Quiñones.
Muchos incidentes atípicos ocurrieron, como el de los muchos minutos de compensación después de los tiempos regulares y los períodos extras, por interrupciones prolongadas del juego; la repetición de dos veces un penal que tiró mal Huerta, porque el portero saló de la línea de gol y paró los disparos. Hasta el tercer intento pudo anotar la nueva estrella de la selección.
