*El tricolor está sometido a los designios del blanquiazul.
De la redacción
El Partido Acción Nacional (PAN) sometió al PRI en casi todo el país. Logró ya el compromiso de que el antes todo poderoso partido de estado, invencible por décadas, haga campaña para el PAN y su candidata presidencial Xóchitl Gálvez, por lo que por primera vez en la historia de las contiendas electorales de esta jerarquía veremos a los activistas del tricolor buscando el voto para su adversario ideológico histórico, creado precisamente por la derecha empresarial para combatir al gobierno del general Lázaro Cárdenas, postulado por el antecedente del PRI.
Y en este sometimiento se inscribe la intención del panismo de quitarle al PRI una de las postulaciones para el Senado de la República, en favor del exalcalde de Huixquilucan y coordinador de los diputados locales, Enrique Vargas del Villar, quien solicitó ya formalmente inscripción en el PAN para la candidatura senatorial.
El acuerdo entre el PAN, PRI y PRD para el reparto de las candidaturas senatoriales de mayoría por entidades federativas, difundido por los tres partidos establece que en el Estado de México sería el tricolor quien postularía al candidato y candidata, por ello sorprendió la inscripción de Vargas del Villar, aunque tal vez lo hizo para ser considerado para una postulación de lista y asegurar el escaño por esta vía, sin violentar el acuerdo tripartita tomado.
Dejarle las candidaturas para el Senado al PRI tendría lógica dada su condición de primera fuerza electoral opositora mexiquense, como se probó en la elección de gobernadora que perdieron las organizaciones políticas de “Va por el Estado de México”, con su candidata Alejandra del Moral. Aunque Morena y sus aliados los derrotó por más de 500 mil votos.
No obstante, al interior de “Va por México”, como partidos por separado, el PRI superó al PAN por un millón 62 mil votos. El panismo aportó a la coalición derrotada sólo 660 mil votos, en números redondos, por un millón 732 mil del tricolor. En estas condiciones, y dado que el PRI le cedió al blanquiazul las candidaturas presidencial y al gobierno de la Ciudad de México, no les pareció bien a los priistas que les quiten una de las candidaturas de mayoría al Senado, ni la de lista.
Como se sabe, por cada entidad federativa hay 4 escaños senatoriales: dos de mayoría, uno de primera minoría y otro lista. Este último no responde estrictamente a la representación por estado, porque hay entidades que no tienen senadores de lista y también quienes tienen más de uno. Por eso en el caso de “Fuerza y Corazón de México”, le importa al PRI tener la fórmula electoral, porque quien la encabece tendrá de antemano garantizada la senaduría de primera minoría, pues no hay dudas de que quedará en segundo lugar.
En este escenario Vargas del Villar busca ser candidato de mayoría a senador, a costa de un o una priista, y contra el acuerdo de reparto de postulaciones dado a conocer.
