*”Siempre” ha dejado de ser un ejemplo editorial.
De la redacción
La publicación en la portada de a revista “Siempre” de una silueta de Claudia Sheinbaum, con una cinta en la cabeza con la swástica nazi, que generó repudio de la comunidad política, cultural e intelectual, llegó al premio “José Pagés”, que otorga la publicación dirigida por Beatriz Pagés Rebollar.
José Alfonso Suárez del Real, quien se encargó de la política cultural de Claudia Sheinbaum y terminó atendiendo temas de gobierno, renunció a esa distinción. Devolvió la estatuilla que le otorgó la revista, antes de gran influencia y numerosos lectores, y ahora irrelevante, pero estridente como parte de la oposición al presidente al presidente Andrés Manuel López Obrador, de Morena y, particularmente, de la cuarta transformación. Del Real consideró un agravio a la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México lo publicado por la revista que le entregó el premio.
El escándalo generado por la portada hizo que se volviera a saber de esa publicación, que en la década de los sesenta y setenta del siglo pasado era referente en el país, por la jerarquía de sus plumas y los temas importantes que examinaba con independencia, profesionalismo y a profundidad.
Beatriz Pagés Rebollar, hija del fundador de la publicación, cambió la portada, ante la presión de numerosos personajes de la vida política, cultural y periodistas, incluyendo algunos que militan en el campo opositor, pero insistió en que lo publicado fue una advertencia de lo que puede ocurrir si gana Claudia Sheinbaum.
Claudia, que tiene ascendencia judía, fue etiquetada por Beatriz Pagés de seguidora del nazismo, cuando los judíos fueron víctimas, precisamente, del régimen nazi de Adolfo Hitler, por lo cual generó también irritación de la comunidad judía de México. A esto atribuyen, más bien, que haya suprimido la portada de la revista por otra.
