*Se ignora si se procederá contra quienes retuvieron las cuotas, pero no las entregaron al Instituto.
De la redacción
El ISSEMYM tendrá que conformarse con recuperar deudas, con pagos a plazo, de los ayuntamientos por aportaciones de los empleadores y cuotas retenidas a los servidores públicos y no entregadas al organismo, durante un período de 15 años; es decir, las instituciones incumplidas podrán ponerse al corriente hasta el 2039, autorizó por unanimidad el Congreso Local cuando en diciembre aprobó el paquete fiscal y de este año.
Los adeudos de ayuntamientos, órganos con autonomía constitucional y organismos auxiliares, que suman miles de millones de pesos, crecieron porque a pesar de que cada año incluyeron en sus presupuestos montos para el pago de sus aportaciones al ISSEMYM, desviaron esos recursos, en lo que constituyó un delito, porque legalmente no pueden destinar fondos de un programa a otro y, mucho menos, robárselos.
No sólo dejaron de aplicar correctamente estas partidas aprobadas para el organismo de seguridad social, sino que tampoco le entregaron las cuotas que, antes de entregarles sus sueldos, les descontaron a los empleados, en una irresponsabilidad que también debió ser castigada, pero a nadie se le sancionó.
Ahora las actuales autoridades municipales y responsables de órganos autónomos y organismos auxiliares del Estado y los municipios podrán diferir el pago de sus deudas con el Instituto hasta por 15 años. En estas condiciones, el ISSEMYM recibirá el pago total del rezago total en 5 trienios municipales, cuando opera con déficit presupuestal por el pago de pensiones e insuficientes ingresos por aportaciones de empleadores y de los servidores públicos.
Las instituciones omisas podrán firmar convenios con el organismo de seguridad social para pagar a plazo de tres lustros sus aportaciones vencidas y el importe de las cuotas ordinarias y extraordinarias descontadas de los servidores públicos, que también gastaron quién sabe en qué, y por lo cual nadie responderá. Para ahora sí garantizar el pago de la deuda se constituirá un fideicomiso con la aportación de un porcentaje de las participaciones que les corresponden de los ingresos federales.