*Es una adicción que puede ser igual de dañina como las sustancias.
De la redacción
Con poca atención de las autoridades competentes, en los últimos años ha sido notoria le existencia de campañas destinadas a inducir en los televidentes la adicción a los llamados juegos de “azar”, como son entre otras las apuestas en casinos, la mayoría en forma virtual y, sobre todo, en los eventos deportivos que se transmiten por televisión. La propaganda es abierta y profusa.
Como si existiera un plan diseñado para volver a los televidentes adictos a las apuestas, hasta los comentaristas deportivos recomiendan apostar sobre diversos resultados posibles. El catálogo de eventos y condiciones para apostar es abultado, y va desde lo más conocido: los resultados de un partido o una pelea de box, hasta los más complicados escenarios.
Puede arriesgarse dinero también sobre el minuto en que caerá el primer gol en un partido de fútbol; el nombre del jugador que lo anotará y el equipo. La imaginación para sacarle dinero a los apostadores es enorme e incluye el número de tiros de esquina de cada equipo en cada uno de los dos tiempos de cada juego.
Esta campaña permanente arroja ya resultados negativos. De acuerdo con información de familiares de adictos y adictas a los juegos de azar, hay amas de casa que tienen este problemas económicos y no pocas acuden a hacer apuestas en forma presencial, descuidando incluso a sus familias, pero también está extendida la práctica de las apuestas mediante la red de redes.
La adicción es tan poderosa, que hombres y mujeres en Metepec apuestan y pierden dinero destinado a satisfacer necesidades básicas, y la campaña de inducción a ese vicio sigue, ante la indiferencia de las autoridades encargadas de regular la publicidad en medios. Por cierto, fue el diputado federal panista Santiago Creel Miranda, como secretario de Gobernación, quien extendió centenares de licencias para casinos, de las cuales un alto porcentaje fueron en favor de Televisa y de las empresas de Jorge Hank Rhon.