*Piloteaba un helicóptero de la compañía de aviación que poseía.
De la redacción
Su afición a pilotear aeronaves condujo a la muerte al ex presidente y multimillonario chileno Sebastián Piñera, el martes 6 de este mes. El helicóptero a su cargo se desplomó en el Lago Ranco, y el político y empresario murió ahogado, a 25 metros de profundidad o, en el lenguaje de los especialistas en servicios periciales, “muerte por asfixia por inmersión”.
Piñera fue presidente de Chile de 2010 a 2014 y de 2018 a 2022, y lo relevó en el cargo Gabriel Boric Font, hace menos de dos años (11 de marzo 2022). La aeronave accidentada era de una empresa propiedad del ex mandatario.
Al morir, de acuerdo con información de especialistas chilenos en el tema, poseía una fortuna cercana a los 3 mil millones de dólares, riqueza enorme para un país de 19 millones de habitantes.
Sus actividades empresariales incluían bancos, constructoras, bolsa de valores, televisora y hasta acciones en el club de futbol Colo Colo, exitosas por su cercanía con la dictadura de Augusto Pinochet y las privatizaciones que siguieron antes y después del retorno de la democracia. Muy joven inició su carrera empresarial.
Estudió ingeniería en la Universidad Católica de Chile, con un posgrado en la prestigiosa Universidad de Harvard, y un hermano mayor, formó parte de una generación que apoyó al dictador Pinochet a implantar el neoliberalismo, como parte de los “Chicago Boys”, según los conocedores de los acontecimientos históricos chilenos de los últimos 50 años.
Viajaban en la aeronave una hermana y otro amigo con hijo, a quienes ordenó abandonar el helicóptero. Pudieron hacerlo y nadaron hasta llegar a la orilla del Lago, pero el político y multimillonario no pudo liberarse de su asiento de piloto.
Sebastián Piñera, quien era considerado un “tiburón” del mercado accionario de su país, dejó una viuda y 4 hijos; dos hombres y dos mujeres.
