CARAS VEMOS… NO SABEMOS
AUGUSTO LOZANO ROBLES
No es un problema menor el generado por Norma Lucía Piña Hernández, ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (CJN) al reunirse con el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, y los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) cuando ya había iniciado el proceso para elegir presidenta o presidente de la República. Los mandos del TEPJF calificarán esa elección, en la cual participa el priismo. Lo más grave es que la reunión fue en un domicilio privado, propiedad del ministro José Luis González Alcántara Carrancá. De haberse efectuado esa reunión en la sede de la Corte, habría generado suspicacia, pero el que lo fuera en una lujosa mansión de la colonia Lomas de Chapultepec, de la Ciudad de México, robustece la hipótesis de que Piña Hernández está metida en la conspiración para anular la elección presidencial, si Claudia Sheinbaum gana la elección presidencial por pocos puntos. Ya es ecandalosa la sede, una residencia ostentosa en una colonia habitada por los más grandes industriales, banqueros, políticos corruptos y hasta grandes narcotraficantes, y el que sea propiedad de un ministro deja mucho más de qué hablar; sobre todo, porque eso explica los fallos a favor de los intereses de las cúpulas que emite la Corte. Por si fuera poco, hasta el que haya sido en la noche y con un personaje tan controvertido como Moreno Cárdenas, genera más sospechas sobre la imparcialidad de la presidenta de la SCJN frente a la lucha presidencial… Muy extraviado parece el analista político Alfonso Zárate, quien sostiene que Claudia Sheinbaum fue postulada candidata presidencial porque no tiene capital político y puede ser manejable por el presidente Andrés Manuel López Obrador. La candidata de la izquierda tiene más capital político cualquiera de quienes le disputaron esa postulación. Ganó y gobernó la Ciudad de México, la segunda entidad más poblada de México y centro político, económico, educativo y cultural del país. Antes había ganado la alcaldía del Tlalpan. Esto no toma en cuenta Zárate, quien inclusive cree que Xóchitl Gálvez ganará; es decir, su caso es el clásico del confundir deseos con la realidad… Alejandro Morenos Cárdenas, líder nacional del PRI, a quien le gusta que le digan “Alito”, quiso sorprender al candidato presidencial del Movimiento Ciudadano (MC), Jorge Álvarez Máynez, al proponerle que renunciara a sus aspiraciones, se sumara a la candidatura de Xóchitl Gálvez y le cediera e hiciera campaña en favor de ésta en los 9 millones de spots que le falta aplicar. A cambio, él “Alito”, renunciaría al PRI y a su candidatura a senador plurinominal. No cayó en la trampa el emecista. Le preguntó que de qué quiere su nieve, porque la candidatura ya no se puede cambiar y su interlocutor será sacado a patadas de la dirigencia priista por los malos resultados que ofrecerá de las elecciones. Faltó recordar que Moreno Cárdenas deberá salir de la presidencia del CEN tricolor en agosto próximo, independientemente del saldo de su partido en las urnas, porque cumple una prórroga de nombramiento, que terminará en ese mes… Un desbarajuste existe en el PT. Las candidaturas de dos alcaldes y a varias sindicaturas y regidurías fueron anuladas. Corresponden a los municipios más importantes, y el problema se agrava porque ya prácticamente terminó el tiempo para hacer campañas con las y los nuevos candidatos… Por cierto, Gustavo Vargas, de Zinacantepec, quien había sido sustituido, habló peste de Óscar González Yáñez, el verdadero mando del PT, y del líder formal, Joel Canseco. Lo hizo una mañana, cuando no sabía que le iban a devolver la postulación. El agravio ahí quedó y ahora debe trabajar su campaña con sus líderes… CONTRAROREJA: “Que no se olvide: Todos somos Palestina, Palestina somos todos”…