*La composición química de las partículas suspendidas se agrava por calor.
De la redacción
Médicos del sector salud mexiquense alertaron sobre la presencia en el aire de partículas contaminadas con agentes químicos y físicos, que aumentaron en esta temporada de calor, por lo cual recomendaron atender las medidas de prevención de las instituciones del ramo.
Respirar estas partículas ha ocasionado el aumento de enfermedades respiratorias, pero a largo plazo pueden provocar rinitis alérgica, asma y Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, conocida por sus siglas EPOC.
Especialistas del ISSEMYM y de la Secretaría de Salud estatal ha coincidido en alertar a la población sobre los riesgos de sufrir enfermedades derivadas de la época de calor, y de mantener el cuerpo hidratado, además de no realizar actividades físicas al aire libre, ni exponerse mucho tiempo al sol.
Recomiendan la ingesta de al menos dos litros de agua al día, para activar el sistema inmunológico, ayudar las funciones cerebrales y mantener el cuerpo hidratado, pues las temperaturas altas generalmente duran hasta septiembre.
Las partículas suspendidas, contaminadas con agentes químicos afectan más a la población infantil, por ello sus familiares deben hidratarlos para no ser afectados en su salud. También los adultos mayores son susceptibles de enfermarse por las elevadas temperaturas y deben consumir agua.
Cada vez hay más partículas suspendidas contaminadas con agentes químicos, utilizados en la agricultura, y en temporadas de secas los vientos las elevan y viajan a las zonas urbanas.
Las más peligrosas son las de 2.5 micras, porque al respirarlas llegan a los pulmones y ocasionar daños severos, de acuerdo con expertos en el tema, especialmente luchadores ambientalistas.
En el Estado de México sin el empleo de fertilizantes químicos, los llamados agroquímicos, el suelo cultivable produce muy poco, por ello no pueden dejar de aplicarse, con efectos nocivos para la población que aspira las partículas contaminadas.
Estas partículas son más dañinas en épocas de estiaje; sobre todo, si se registran severas sequías, como ocurre en estos momentos, en los cuales también se padece una crisis por insuficiencia de agua potable en las dos zonas metropolitanas de las cuales forma parte el Estado de México: la del Valle de México y la del Valle de Toluca, que en conjunto se aproximan a los 14 millones de habitantes estatales.