*La reacción de los grupos priístas inconformes con Moreno Cárdenas es demasiado tardía.
De la redacción
Lejos de atenuarse, escala el problema interno en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), donde su dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas quiere eternizarse en la posición, en la cual lleva ya 5 años. Logró que los aparatos partidistas aprobaran los cambios que propuso, para poder elegirse hasta por tres veces consecutivas por períodos de 4 años cada uno.
Manlio Fabio Beltrones, senador electo de primera minoría por Sonora, quien buscaba coordinar la reducida bancada senatorial de su partido y que vio esfumarse esa posibilidad, al recordarle Moreno Cárdenas su involucramiento en el caso Colosio, anticipó que no saldrá del PRI, pero que votará simpre en el Senado de acuerdo con sus convicciones.
Sostuvo que el también conocido como “Alito” es el peor dirigente nacional en la historia del PRI, desde su fundación en 1929, pues de ser el partido mayoritario, lo condujo a ocupar la condición de cuarta fuerza electoral, y que todavía piensa seguir manejando a la organización, con respaldo de sus incondicionales (esos incondicionales forman abrumadora mayoría en los órganos internos y obedecen lo que les dice su líder), a pesar de su incapacidad directiva.
Dulce María Sauri Riancho, exgobernadora de Yucatán y expresidenta del Comité Ejecutivo Nacional priista, junto con otros personajes importantes se mostró confiada en que las autoridades electorales anularán la Asamblea Nacional número 24 del priismo, que aprobó el cambio estatutario para ponerle fin al candado que prohibía la relación, y que fue incorporado a los estatutos en 1932, porque la legislación electoral no permite modificaciones a nomas partidistas en tiempos de procesos electorales, como el actual.
Moreno Cárdenas fue electo presidente del CEN del PRI en 2019, por un período de 4 años, que venció en agosto del año pasado. Precisamente por estar iniciado el proceso electoral, no hubo elección y consiguió prorrogar su gestión, para sumar 5 años al mando del tricolor. Ahora podrá estar 12 años más en el cargo, porque la reforma no toma en cuenta los 5 años ya pasados.
Cuando inició su gestión el PRI tenía en su poder 11 estados, incluyendo el más poblado del país, el Estado de México. Ahora no gobierna una sola entidad federativa, aunque es cogobierno con el PAN y el PRD en Durango, Coahuila y Aguascalientes, cuya población global no llega 5 millones. Además, hasta el Movimiento Ciudadano le ganó en 23 estados en la elección presidencial.