*Los dueños del dinero pusieron al descubierto al servicio de quién está la SCJN.
De la redacción
Desde el paro de los trabajadores del Poder Judicial Federal la ultraderecha empresarial mostró su apoyo a ministros, magistrados y jueces contra la reforma judicial que impulsa Morena y sus aliados.
Hay respaldos que perjudican, en lugar de ayudar, y este es un caso de esos, porque precisamente, los señalamientos de las más altas autoridades del país, encabezadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador contra la resistencia a la reforma judicial son en el sentido de que está al servicio de los dueños del dinero del país.
A pesar de que los trabajadores del Poder Judicial de la Federación se fueron al paró en defensa de sus derechos laborales -presuntamente ven riesgos por la citada reforma cuyo punto central es la elección de ministros, magistrados y jueces- no obtuvieron respaldo social.
Demandaron el apoyo de la sociedad y de los asalariados de la nación, pero no consiguieron respuesta positiva, prueba de que su lucha no es popular, y menos, por la aclaración de los poderes Ejecutivo y Legislativo federales en el sentido de que los derechos de los trabajadores no serían tocados por la reforma.
En cambio, hubo desplegados de las organizaciones cúpulas del sector empresarial, lo que hizo creíble las declaraciones del presidente López Obrador; de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, senadores y diputados federales en el sentido de que el Poder Judicial Federal está al servicio de los dueños del dinero.
Expresaron su apoyo decidido al paro y a los ministros, magistrados y jueces del Poder Judicial de la Federación los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), organismo cúpula del sector privado, dominado por la ultraderecha.
De la misma forma se pronunciaron en el mismo sentido el Consejo Mexicano de Negocios (CMN), antes Consejo de Hombres de Negocio (CHN), que cambió de denominación por lo del feminismo.
En esa organización militan sólo los dueños de las más grandes corporaciones empresariales, los empresarios más poderosos del país. Este organismo también se declaró en contra de la sobrerrepresentación legislativa.
La COPARMEX, el único sindicato empresarial que existe en México, igualmente expresó su apoyo a ministros magistrados y jueces y se declaró en contra de que el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) otorguen mayoría calificada al partido en el poder.
No obstante, el respaldo de las cúpulas empresariales al Poder Judicial Federal perjudicó a éste, porque acreditaron que la institución es su trinchera para la defensa de sus intereses antipopulares, como ocurre con los juicios y amparos por evasión o elusión fiscal.