
*Llegará con más apoyo popular ante una débil oposición y poderes fácticos cautelosos.
De la redacción
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, primera mujer en la historia del país en ocupar el cargo, lo asumirá en mejores condiciones políticas, económicas, electorales e institucionales de las encontradas en diciembre de 2018 por el presidente Andrés Manuel López Obrador, según analistas de “El Espectador”.
Iniciará su sexenio con un respaldo popular mayor al obtenido por el mandatario saliente, incrementado por el contacto con el pueblo en las giras de trabajo de ambos. “Sus cerca de 36 millones de sufragios son una marca máxima, prueba del apoyo popular de la cuarta transformación”, explicó Leoncio Mata Zárate.
En contrapartida, “enfrentará una oposición debilitada por los votantes en las urnas, confundida y con problemas internos serios”, además de la desaparición del lastre para el espectro partidista representado por el PRD, abundó el columnista.
Por su parte, Jorge Iván Frausto Leal recordó que el presidente Andrés Manuel López Obrador “encontró un país al bordo del abismo, con los mayores niveles de corrupción, pobreza e injusticia social de la historia e hipotecado el futuro nacional”.
El mandatario saliente encontró difíciles condiciones políticas, económicas e institucionales, por el sometimiento de las instituciones, “comenzando por la propia presidencia de la República, a los intereses del reducido, voraz y corrupto grupo de la nueva oligarquía criolla, formada y fortalecida desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari hasta el de Enrique Peña Nieto, concentrador del ingreso y la riqueza nacional”, recordó, el editorialista de este medio informativo.
Los intereses de la población, aseveró, fueron abandonados “y en la práctica esa era una política de Estado, cuyo mantenimiento buscaron esos intereses en 2018, mediante presiones mediáticas y la puesta en juego permanente de maniobras de descalificación, basadas en calumnias y augurios infundados de desastre económico, de autoritarismo y pérdida de las libertades”.
En el caso de la ultraderecha, “gastó enormes cantidades de dinero en los medios informativos en un intento por convencer de que Morena y la cuarta transformación nos conducirían al comunismo, sistema que, fuera del comunismo primitivo, jamás existió en el mundo”, recalcó Frausto Leal.
Sobre el mismo tema, Mata Zárate explicó que ese conjunto de problemas no los enfrentará la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, “pero debe más bien atender la situación del difícil del entorno económico internacional”.
La misma ultraderecha empresarial, que financió con decenas de miles de millones de pesos las campañas de desprestigio contra el presidente Andrés Manuel López Obrador ya se convenció de que fue una estrategia fracasada, y no se animará a arriesgar tanto dinero en los grandes medios informativos. Será cautelosa ahora, abundó.
Otras ventajas que la mandataria tendrá desde inicio de sus sexenio sobre el anterior es que ya no destinará presupuesto en grandes proyectos como el Tren Maya, la refinería Olmeca, el AIFA o el Tren Interoceánico. “A éste último le invertirá poco para concluirlo, y los efectos benéficos de esas megaobras los recibirá el nuevo gobierno”.
Por si fuera poco, comenzará el sexenio con 24 estados gobernados por Morena, incluyendo los más poblados, como el de México, la Ciudad de México, Veracruz, Puebla y Chiapas.
Mata Zárate comentó igualmente el control de Morena y sus aliados del Poder Legislativo Federal, los 27 congresos locales, condiciones no existentes en diciembre de 2018, cuando asumió el cargo el presidente López Obrador.