*Lo responsabilizan de obstruir las investigaciones en torno a la muerte de un alumno.
De la redacción
La captura el lunes por la noche en una colonia de Zinacantepec del director de la escuela normal “Lázaro Cárdenas del Río” de Tenancingo, Cenobio Fuentes Calderón, de 43 años, como presunto responsable de obstaculizar las investigaciones de la muerte del alumno Brayan Isidoro Zarco Rivera, afectará la imagen de ese plantel formador de maestros.
El lunes estudiantes normalistas ingresaron a las oficinas centrales de los Servicios Educativos Integrados al Estado de México (SEIEM), donde causaron destrozos en equipos de cómputos y también rompieron cristales de vehículos que se encontraban en el estacionamiento, en Santa Cruz Azcapotzaltongo, de esa capital del Estado, con lo cual en la población se reformó la imagen de violentos que tienen.
No obstante, esos actos nada tenían que ver con la detención de Fuentes Calderón, la cual ocurrió horas más tarde por elementos de la policía ministerial, dependiente de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), en cumplimiento de una orden de aprensión, expedida por un juzgado penal de Tenancingo, por obstaculizar las investigaciones del homicidio del estudiante normalista Brayan Isidoro Zarco Rivera, ocurrida el 12 de julio de este año, en el plantel.
De acuerdo con la FGJEM, el directivo, a quien apodan “El Ché”, encubrió los hechos en que Razo Rivera perdió la vida a manos de 4 de sus compañeros. Facilitó la fuga de tres de los culpables y ordenó sacar de un salón el cadáver de la víctima, para después sostener que los hechos ocurrieron fuera de las instalaciones.
Además, siempre de acuerdo con la información de la Fiscalía, ordenó al personal de la Normal impedir el ingreso de los investigadores al plantel y ocultó pruebas de la agresión, ocultó la madera con huellas de sangre utilizada para agredir a la víctima.
Por todo ello se le formularon cargos y un juzgado penal de Tenancingo consideró que existían elementos suficientes para suponer actos constitutivos de delitos y obsequió el mandamiento de captura, que al cumplirse y difundirse perjudicó la imagen de la Normal Rural “Lázaro de Cárdenas del Río”, que le han formado sus alumnos radicales.
