*También se apreció el salario mínimo por primera vez en cincuenta años.
Gabriel L. Villalta
El 30 de septiembre pasado, en su última conferencia matutina, mejor conocida como la “mañanera”, el entonces todavía presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que se logró reducir la pobreza y desigualdad en el país, a pesar de que la pandemia “tumbó la economía, como no sucedía en más de un siglo”. Y reconoció que, aún cuando creció poco la economía, como hubo una distribución “justa” de la riqueza, el ingreso y el presupuesto pudieron mejorar las condiciones de vida y las condiciones de trabajo de la mayoría de los mexicanos.
Afirmó que, gracias al nuevo modelo económico, durante su sexenio se crearon 2 millones 409 mil empleos formales y ahora se tienen 22 millones 490 mil trabajadores inscritos en el Seguro Social. La tasa mensual de desempleo es de 2.7%, una de las menores tasas en la historia del país y una de las más bajas a nivel mundial.
López Obrador agregó que el salario promedio de los trabajadores inscritos al Seguro Social es de 17 mil 691 pesos mensuales. “México es el país donde más aumento el salario mínimo en el mundo”, indicó.
Finalmente, la informalidad laboral se logró reducir 2.25% real en el sexenio, pasó de 56.5 a 54.3%; cifras mejores a las de los tres sexenios anteriores.