*La lucha contra la corrupción no ha existido en el Edoméx, y el sistema se resiste a implementarla.
De la redacción
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) anunció hoy la renuncia de Rubén Durán Miranda, quien se encargaba de manejar el presupuesto de la institución, pero tiene un proceso penal por presuntos actos de corrupción, como coacusado de Leopoldo Cerrillo Werring, quien era director general de Auditoría del Sistema de Administración Tributaria (SAT).
El titular de la FGJEN, José Luís Cervantes Martínez, aceptó la renuncia de su colaborador, pero fijo el 16 de diciembre como fecha para que surta efecto, para que el proceso de entrega-recepción de la Oficialía Mayor sea ordenada y se cierre bien el ejercicio presupuestal de este año.
Durán Miranda reconoció que tiene un proceso penal en su contra y necesita tiempo para atender los requerimientos de la autoridad judicial que tiene a su cargo el desahogo del caso, como ocurre también con Leopoldo Carrillo, importante mando del SAT, área de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), encargada de cobrar impuestos, efectuar auditorías a los contribuyentes. Ambos están acusados de abuso de autoridad y de sus funciones en el servicio público.
La noticia de la renuncia en cuestión y las causas de la misma sorprendieron al mundo institucional mexiquense; sobre todo, por la falta de rigor en el otorgamiento de designaciones en dependencias de funciones delicadas, como lo es la que administra el presupuesto de la Fiscalía, que lleva varios años con autonomía constitucional.
De la misa forma, los comentarios son en el sentido de que fue grave que un alto funcionario cargara con la presunción de actos de corrupción, aunque ese problema hubiese iniciado cuando era servidor público federal, que tiene como principal bandera la lucha contra la corrupción y la impunidad.