*En conversación con la presidenta Sheinbaum Pardo pospuso un mes la medida.
GABRIEL L. VILLALTA
Donald Trump, el gobernante más poderoso del mundo -por estar al frente de la primera potencia económica y militar a escala planetaria-, tuvo un momento de lucidez en su conversación telefónica del lunes 3 de este mes con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y aceptó diferir 30 días la aplicación del 25 por ciento como aranceles de las exportaciones mexicanas al vecino del norte.
En este lapso, funcionarios de alto nivel de ambas naciones estudiarán y negociarán el tema, lo mismo que los del tráfico de drogas, migrantes y armas en la frontera común, y el déficit comercial; todo en un plano de igualdad y con respeto absoluto a la dignidad y la soberanía de los dos vecinos y socios comerciales.
El presidente de Estados Unidos adoptó una serie de decisiones claramente contrarias a los intereses de su país y del mundo, que generaron serias dudas sobre su estado mental.
Entre esos despropósitos mayores están la arrogación de intervenir en otros países, para recuperar el Canal de Panamá, comprar o apoderarse de Groenlandia, convertir a Canadá en el estado 51 de los Estados Unidos y mandar tropas a combatir y eliminar narcotraficantes, calificados de “terroristas internacionales”.
Medidas como la de los aranceles, considerada por uno de los diarios financieros más influyentes del mundo como “la más tonta en la historia de Estados Unidos”, por sus efectos contrarios a los intereses de la propia potencia económica y militar, puede implementarla, aunque resultaría dañina para todos, pues está en la facultad del gobierno trumpista aplicarla o no, estemos o no de acuerdo.
En el caso de los aranceles, su aplicación inmediata hubiese ocasionado severos daños a la economía de ambos países, pero la medida ha sido aplazada, mientras equipos de alto nivel de las dos naciones revisan y examinan en forma conjunta el espinoso tema y llegan a una salida conveniente para las partes.
El solo anuncio de la aplicación de la disposición arancelaria trumpiana había generado nerviosismo en los mercados. La cotización del dólar en México superó los 21 pesos la madrugada del 3 de este mes.
Una vez pactada la pausa o posposición de la entrada en vigor de los aranceles, la moneda mexicana se recuperó y horas después ya estaba en los 20.42 por la moneda estadounidense.
Todos los analista especializado en economía, finanzas y comercio internacional habían advertido que una guerra de aranceles perjudicaría gravemente a los países involucrados y más a sus respectivas poblaciones.
En la conversación telefónica Sheinbaum-Trump, de casi 45 minutos, México se comprometió a reforzar la seguridad en la frontera con Estados Unidos, para combatir el tráfico de drogas hacía el vecino país.
No obstante, la mandataria mexicana le hizo saber a su homólogo estadounidense que debe trabajar para combatir las adicciones a las drogas que padecen los jóvenes de la potencia económica y luchar contra el narcomenudeo, el “lavado de dinero de esa actividad criminal, y evitar el envío ilegal de armas a los narcotraficantes mexicanos, que generan violencia y muerte.