*Su captura ocurrió hace ya años en territorio mexiquense.
De la redacción
En su conocida escasa capacidad de reflexión autocrítica, en campaña electoral como candidata presidencial de la ultraderecha empresarial y partidista, la entonces senadora Xóchitl Gálvez Ruiz atribuyó casos de corrupción a hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador y de familiares de la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo.
No presentó prueba alguna, y en cambio, quien tenía un familiar cercano deliencuente era la abanderada del PRI, PAN y PRD: su hermana menor Jacqueline Malinali Gálvez Ruiz, llevaba 12 años presa y sujeta a proceso penal por delitos graves, como el de delincuencia organizada, privación ilegal de la libertad por particulares, en la modalidad de secuestro, además de posesión de cartuchos para armas de uso exclusivo del ejército.
En los meses finales del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, la mujer fue detenida en la zona de Xonacatlán, Estado de México, donde estaba su centro de operaciones. Tenía en su poder a dos personas secuestradas. Las retenía sometidas y reducidas en jaulas metálica. Las víctimas eran torturadas, mutiladas y las partes mutiladas eran enviadas a sus familiares, para persuadirlas en el sentido de cubrir las fuertes sumas que exigían como rescate.
De la misma forma y con el mismo fin, eran videograbadas en las jaulas, cuyos materiales también les hacía llegar a los familiares de las personas plagiadas con fines de extorsión. Fue sentenciada sólo por dos secuestros, pero se sabe que “Los Tolmex” perpetraron varios más.
El viernes pasado la hermana de la excandidata presidencial dejó su situación de presunta delincuente, al ser encontrada culpable de esos delitos graves y recibir sentencia condenatoria de 89 años, de los cuales pasó ya cerca de 13 (fue detenida en el 2012, durante el sexenio del panista Felipe Calderón Hinojosa), por lo que no puede aducirse una persecución política.
La participación de la hermana menor de Xóchitl Gálvez Ruiz era como mando, y una función muy importante dentro del grupo criminal consistía en seleccionar las víctimas entre personas de familias de altos ingresos, a cuyos círculos la ahora sentenciada a condena de 89 años tenía acceso.
Una vez cometidos los secuestros, se presentaba ante las familias de las o los secuestrados para expresar su solidaridad y conocer la posición de los parientes en las negociaciones para el pago de rescate y la liberación en cada caso; es decir, para saber cuánto estaban dispuestos y en condiciones de reunir el dinero.
A pesar de este antecedente familiar, como candidata presidencial, Xóchitl Gálvez Ruiz acusaba al presidente López Obrador y a la candidata de Morena a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum Pardo de tener familias delincuentes. Por cierto, la morenista no aprovechó el encarcelamiento de Jacquelin Malinali para atacar a su adversaria, ni mencionó el nombre de la ahora condenada.
Jacqueline Malinali Gálvez Ruiz era mando de la banda criminal dedicada al secuestro, denominada “Los Tolmex”, con cuyo líder, Leonardo Sales Andrade, “El Tolmex”, la hermana de Xóchitl sostenía una relación sentimental.