*La autosuficiencia alimentaria es un tema crítico de seguridad nacional.
De la redacción
México perdió 36 años en materia de autosuficiencia alimentaria. Entre 1982 y 2018, no atendió ni generó condiciones para elevar la producción agrícola y pecuaria; es decir, en los sexenios de Miguel de la Madrid Hurtado, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto.
Fervorosos seguidores del credo neoliberal y del sofisma que era perjudicial invertir en la producción agropecuaria, si se podían conseguir los alimentos más baratos en el mercado internacional, dichos personajes abandonaron al campo, como lo prueba que en esos seis sexenios sólo se incorporaron al riego 7 mil hectáreas destinadas a la producción de alimentos.
Como resultado de ese descuido, o más bien de esa visión cortoplacista neoliberal, ahora el país es autosuficiente sólo en maíz blanco, pero es deficitario en la producción de maíz amarillo y en maíz forrajero, por lo que debe importarlos, y ello se traduce en un desequilibrio en la balanza comercial de estos productos.
De acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), a pesar de que en el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador se incorporaron al riego más de 110 mil hectáreas (16 veces que en los 36 años anteriores), del total de la extensión cultivable sólo el 26 por ciento dispone del riego.
En contraste, el 74 por ciento es de temporal, lo cual representa una fragilidad de la agricultura mexicana, por estar expuesta a malos ciclos de lluvias, precisamente lo que en los últimos años ha ocasionado el aumento de las importaciones de granos y al déficit en contra en el intercambio de productos del campo.
El Plan Nacional de Tecnificación del Riego, anunciado hace poco, tiene como objetivo expandir la superficie cultivable de riego, mediante el óptimo aprovechamiento del agua, para ahorrarla y destinarla a satisfacer necesidades del consumo humano y ampliar la frontera agrícola para producir más con menos agua.
Las autoridades federales buscan revertir el problema de la inseguridad en la producción de alimentos de origen rural, pero la situación es de tal dimensión que el citado Plan abarcará 200 mil hectáreas, de 13 distritos de riego ubicados cerca de zonas urbanas, para también aprovechar en uso doméstico los ahorros que se tengan en el riego.