*La complicidad entre autoridades mexiquenses y delincuentes es cada vez más evidente.
De la redacción
En el marco de la operación “Enjambre”, fuerzas de seguridad federales y estatales ejecutaron órdenes de aprehensión en Toluca, Atlacomulco y Almoloya de Alquisiras contra Ari Patrick “N”, exalcalde de Almoloya de Alquisiras y a su hermano Baltazar “N”; a José Humberto “N”, síndico en funciones de Aculco; a Edgar “N”, exdirector de Seguridad Pública del mismo municipio; y, a Guillermina “N”, comerciante de Almoloya de Alquisiras.
Tenían ordenes de aprehensión por el delito de extorsión y delincuencia organizada, vinculados con el grupo criminal “La Familia Michoacana”. En su detención participaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDEA), de la Secretaría de Marina (SEMAR), de la Fiscalía General de la República (FGR), de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Guardia Nacional (GN), y del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Por la entidad mexiquense intervinieron agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), quien fue la que obtuvo las órdenes de aprehensión; de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM). Las personas detenidas fueron ingresadas a diferentes penales del Estado, a disposición de los juzgados penales que las reclamaban.
Ari Patrick era quien ordenaba las extorsiones en municipios de la Zona Metropolitana del Valle de Toluca, y José Alberto hacía lo mismo en el norte de la entidad, como integrantes de la delincuencia organizada, específicamente de la “Familia Michoacana”, a la cual las autoridades mexiquenses nombran con el eufemismo de grupo delictivo “con origen en Michoacán”.
De acuerdo con la información oficial, alcalde y ex mando policíaco, lo mismo que el síndico de Aculco en funciones, aprovechaon sus posiciones institucionales para delinquir, y lo seguían haciendo aun cuando no eran ya funcionarios públicos. Edgar “N” renunció a su cargo apenas el 11 de febrero de este año.
Ari Patrick y su hermano Baltazar fueron capturados en Toluca, y junto con la comerciante “Guillermina”, extorsionaban comerciantes, a quienes además del “derecho de piso”, los obligaban a comprar mercancías e insumo a la primera, ex alcaldesa de Almoloya de Alquisiras, donde el año pasado ocurrió una masacre, en la cual la mayor parte de las víctimas eran miembros de un grupo criminal y extorsionaban a agricultores, para “dejarlos” trabajar.
