1-La verdad es que no alcanzarían los postes de la luz para quemar a tantos judas contemporáneos.Y en la cocmparación con el Judas original, éste tiene la ventaja de que se arrepintió de su felonía, tiró las 30 monedas que recibió por entregar a Cristo y se suicidó. Los modernos judas niegan inicialmente sus traiciones (delitos), huyen cuando no pueden ocultarlos, se amparan y recurren a sus redes de protección para obtener impunidad. Y en no pocos casos se duelen de que no les reconozcan sus grandes servicios a la patria.
2-Desproprocionada parece la reacción de las potencias occidentales ante el intento de envenenamiento de un espía de origen ruso (que estuvo al servicio de occiednte) y su hija, ocurrido en Londres. Tensaron las relaciones con Putin y expulsaron de varias naciones a más de cien diplomáticos que presuntamente eran espías rusos. Rusia tomó represalia y también expulsó diplomáticos de gobiernos occidentales.
El canciller Luís Videgaray, quien se la vive buscando la forma de congraciarse con Trump y le adivina el pensamiento en cuanto a la política estadounidense para América Latina, quiere subirse a ese conflicto, en el cual México no tiene vela y se originó a miles de kilómetros de nuestro territorio. No le preocupan las masacres con saña inaudita que se han cometido en México en los últimos días, que incluyen desacuarizamiento de cuerpos, pero sí que estén enfermos y convaleciendo en la capital inglesa un ruso que espiaba a su país para occidente y su hija. Debe haber prioridades. O quizá esas son las suyas.
