1-La incorporación del senador independiente, Armando Ríos Piter a la campaña electoral de José Antonio Meade desnudó el verdadero objetivo que tenía el guerrerense al buscar la candidatura presidencial independiente: quitarle votos a Andrés Manuel López Obrador y atacarlo en los debates, para favorecer al abanderado priísta. En ese empeño, cuando recolectó firmas de apoyo incurrió en delitos electorales, y al no obtener registro decidió trabajar para su amigo, compañero de estudios en el ITAM y en el servicio público. En descargo de Ríos Piter debe decirse que optó por unirse a quien está en tercer lugar en las encuestas.
2-Silvano Aureoles confirmó lo que se dijo cuando fue postulado por el PRD a gobernador de Michoacán: que era el candidato no de su partido, sino del presidente Enrique Peña Nieto y Luís Videgaray, seducido mediante Emilio Gamboa Patrón. Ahora se quitó la careta e irá en Michoacán contra la organización política que oficialmente lo llevó al cargo. Conocedores apuestan a que Graco Ramírez, el saliente gobernador de Morelos, seguirá los pasos de Aureoles.
3-En el debate de esta noche López Obrador tendrá la desventaja de que los tres conductores mantienen en sus espacios de opinión y conducción de noticias posiciones contrarias a las aspiraciones del tabasqueño, y como podrán hacer preguntas, buscarán hacerlo quedar mal. El INE debió buscar un equilibrio en esto. Mayor imparcialidad habría si al menos uno de los coordinadores del debate fuera imparcial.
4-Muchos seguidores del Toluca no quieren que el equipo quede en primer lugar, porque hay una especie de maldición gitana que hace que quien encabeza la tabla general sea eliminado en la liguilla, generalmente por el club que se califica en el octavo lugar.
