*Anaya, Meade y “el Bronco” atacarán con todo al candidato de Morena.
Los candidatos presidenciales Ricardo Anaya Cortés, de “Por México al frente”; José Antonio Meade Kuribreña, de “Todos por México”; y el independiente Jaime Rodríguez, “el Bronco”, tendrán mañana su última oportunidad de atacar directamente a Andrés Manuel López Obrador, de “Juntos haremos historia”, en el debate de Mérida, Yucatán.
Será la tercera y última confrontación de los cuatro interesados en relevar al presidente Enrique Peña Nieto, y el objetivo de los adversarios del tabasqueño será el de restarle preferencias electorales y reducir la ventaja que les lleva en la intención del voto, para quedar en condiciones de disputar con posibilidades de éxito el cargo de máxima responsabilidad del país.
En la capital de Yucatán los candidatos presidenciales expondrán sus propuestas sobre economía, pobreza y desigualdad; educación, ciencia y tecnología; desarrollo sustentable y cambio climático, pero debido a las limitaciones impuestas por el formato de debate, no se espera presenten con amplitud y suficiencia sus principales acciones de gobierno en esos temas.
Además, los ataques y descalificaciones, principalmente contra López Obrador, y las réplicas consumirán tiempo, y se restará del destinado a difundir sus ofertas de gobierno. De cualquier manera, los cuatro candidatos no volverán a verse así las caras en este proceso electoral, por ello mañana será la última oportunidad de Anaya, Meade y Rodríguez de combatir directamente al fundador y líder de Morena.
Los ataques inevitablemente se dirigirán contra el puntero en las preferencias electorales, no contra quien es el candidato oficial, como ocurre por lo general, lo cual se explica porque Meade Kuribreña continua en tercer lugar, y sus adversarios no le conceden posibilidades de triunfo, por eso no lo atacan, salvo para recordarle que representa a un partido y gobierno corruptos.
Hay interés también por observar si el extitular de la SHCP evita criticar a Anaya Cortés, como lo hizo en el segundo debate efectuado en Tijuana. Esa noche no tocó ni con el pétalo de una rosa al exdirigente nacional del PAN, lo cual dio lugar para que se especulara la existencia de un acuerdo entre las cúpulas de las coaliciones “Por México al frente” y “Todos por México”, para una declinación de Meade en favor del panista o en una alianza de facto para derrotar a López Obrador.
Finalmente, diversos analistas consideran ya inevitable el triunfo del tabasqueño, y prevén que la estrategia del gobierno y el PRI se centrará no tanto en golpear a López Obrador, como a gente de su equipo y entorno, buscando con ello que el electorado crea necesario un contrapeso a las decisiones y acciones del futuro presidente y rescatar así las campañas de sus candidatos al Congreso de la Unión, como única salida para una debacle, de otro modo, total.