El INEGI dio a conocer que en 2016, 4.2 millones de servidores públicos trabajaban en las diferentes instituciones de las administraciones públicas del país, lo cual representó una tasa nacional de 344 servidores públicos por cada diez mil habitantes. El 39.0% laboraba en el ámbito federal y el 61.0% en administraciones estatales. En entidades como Puebla, Sinaloa y Coahuila de Zaragoza había menos de 100 servidores por cada diez mil habitantes. En contraste, en estados como Tabasco, Guerrero, Colima, Nayarit, Baja California Sur, Zacatecas, Yucatán, Durango, Hidalgo y Ciudad de México, más de 344 servidores por cada diez mil habitantes. En el Estado de México este indicador fue de 179 servidores por cada diez mil habitantes. De acuerdo con la función que desempeñaban, la mayor parte del personal estatal laboraba en instituciones educativas, las cuales concentraban 51.1% del personal; en tanto 14.7% de los servidores públicos estatales estaban adscritos a instituciones dedicadas a la salud, y 14.4% en instituciones de justicia.
