Luego de que la Junta de Gobierno del Banco de México decidiera por unanimidad incrementar en 25 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día, a un nivel de 7.75%, los usuarios de crédito a tasa variable -como las tarjetas de crédito- pagarán más por concepto de intereses. A diferencia del optimismo oficial, el banco central justificó esta decisión debido a un “escenario sujeto a riesgos y a una marcada incertidumbre”. Así, la tasa se encuentra en niveles similares a los de 2009, cuando la economía nacional aun experimentaba los remanentes de la crisis financiera global de 2008; solo que ahora la economía mundial se encuentra en expansión, y en particular se espera un repunte más fuerte de la economía norteamericana, principal socio comercial de México y destino de sus exportaciones. El Banco de México aseguró que estará atento al comportamiento de la inflación y dejó abierta la posibilidad de aumentar la tasa de interés interbancaria nuevamente.