El rey de los camaleones de la política mexicana, Emilio Gamboa Patrón, quien pintó a José Antonio Meade como un semidios cuando fue ‘destapado’ como candidato presidencial de su partido, ahora dice que el PRI hizo mal al modificar sus estatutos para que pudiera postularse un externo.
Por cierto, él fue uno de los principales promotores de esos cambios estatutarios. Lo hizo para congraciarse con el presidente Peña Nieto, pero como éste ya se va muy debilitado y no podrá hacerle más favores, Gamboa critica lo que él aprobó con fingido entusiasmo.
Sus declaraciones deben ubicarse en la lucha de los grupos priístas por los retazos que quedaron de ese partido. Gamboa sigue siendo uno de los principales mandaderos de Carlos Salinas de Gortari.
Por cierto, que grupos poderosos del PRI busquen dominar un partido que se desfondó en las urnas, y que esa guerra interna sea tan intensa, solo puede significar que no dan por perdido a su instituto político, es más, lo consideran con futuro, y eso solo puede ser porque esperan, buscan o prevén un terrible desempeño de las autoridades vencedoras. Los electores deben recordar que muchos de los candidatos ganadores no tienen experiencia en temas de gobierno y, de los que sí la tienen, muchos fueron malos gobernantes cuando compitieron por otras siglas, solo unos cuantos de los vencedores son oro puro.
Un jaloneo similar se vio cuando perdió Madrazo, y el grupo que resultó finalmente dominante al interior del PRI es el que llevó a Peña a la presidencia.
