*Cada tres horas le quitaron la vida intencionalmente a un mexiquense en 2017.
Mientras los homicidios subieron 29 por ciento en el país, en el Estado de México se “logró” limitar ese crecimiento al 10 por ciento; sin embargo, hubieron más de 3 mil asesinatos durante el 2017, es decir, uno cada tres horas, con víctimas tanto hombres como mujeres.

El Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática reveló que con datos preliminares del cierre del 2017, el 9.7 por ciento de todos los homicidios del país, es decir casi uno de cada diez ocurrió en la entidad mexiquense, ubicándose como la zona con más casos, pero no con la mayor tasa, para consuelo de las autoridades.
En términos relativos, el Edomex fue superado por otras 18 entidades, donde Colima se lleva el primer lugar con una tasa de 113 homicidios por cada 100 mil habitantes (el Estado de México tiene un nivel de 18), mientras en el lado opuesto del ranking está Yucatán, con sólo dos muertes por cada cien mil habitantes, un lugar seguro para vivir.
Sin embargo, la tasa mexiquense ha ido en aumento, al pasar de 10 en 2008 a 18 al cierre del año pasado, y ha tenido años con peores condiciones como es el caso del 2013, cuando la tasa llegó a 20, superando la media nacional de ese año (19).
En las causas de las defunciones destaca el uso de armas de fuego, tanto largas como cortas, en 68 por ciento de los casos, con una mayor prevalencia en contra de los varones 11 veces superior. La segunda forma para asesinar en México son las agresiones por ahorcamiento, estrangulamiento y sofocación, pero ya con sólo 6.7 por ciento de los casos.
El número de hombres que resulta asesinado en el país es 8 veces mayor al de mujeres en general y en cada una de las modalidades, donde no sólo se usan armas, sino drogas y medicamentos, sustancias corrosivas, plaguicidas, gases y vapores, diversos productos químicos, ahogamiento, fuego, empujones de sitios elevados, colisión de vehículo de motor, negligencia y abandono, maltrato, uso de la fuerza corporal, entre otros mecanismos. Sólo en los casos de agresiones sexuales no hay víctimas masculinas, sólo femeninas.
En general y a nivel nacional, los datos revelan que la tasa de homicidios pasó de 20 por cada 100 mil habitantes a 25, en solo un año. Esto derivado de los registros administrativos de defunciones accidentales y violentas en las entidades federativas y los registros de 2 mil 127 Oficialías del Registro Civil, 668 Agencias del Ministerio Público y de 145 Servicios Médicos Forenses que reportan esta información al INEGI.
A partir del 2011 se había logrado ir a la baja en este tipo de delitos, alcanzando su menor nivel en 2014, pero esta incidencia volvió a subir y alcanzó el año pasado su mayor cifra desde 2008, es decir, en la última década.
La tasa también es la mayor registrada desde 1990. La más cercana fue en 2011 con 22, pero en esta ocasión alcanza los 25 casos por cada 100 mil habitantes, donde Chihuahua tiene 59, baja California 60, Baja California Sur 91, Guerrero 71 y Zacatecas 43, entre otras entidades donde murió mucha gente por causas no naturales ni enfermedad o actos no culposos, sino por violencia y en muchas ocasiones actos pensados y premeditados.