El periodismo cultural mexicano perdió a uno de sus más brillantes referentes: el miércoles pasado a los 83 años de edad dejó de existir en la ciudad de México Huberto Batis, fomentador de lectores y de jóvenes literatos talentosos, ahora figuras de las letras, directores o colaboradores de los mejores suplementos culturales del país.

Son los casos de Jorge Volpi, Enrique Serna, Xavier Velasco, Ignacio Padilla (qepd), Alberto Ruy Sánchez, Guillermo Sheridan, Pura López Colomé y Adolfo Castañón, para citar sólo a los más destacados.
Dedicó 57 años a la cátedra de literatura hispana y 60 al periodismo cultural. Formó a generaciones de cronistas, críticos literarios y reporteros de cultura en el suplemento, que ahora son responsables de secciones de los diarios más importantes.
Dirigió “Sábado” de Unomásuno”, entre 1984 y 2000. Antes había colaborado durante 7 años en el mismo “Sábado” con Fernando Benítez, considerado el padre de los suplementos culturales de México. La enorme calidad de literaria no fue obra de la casualidad; al contrario, fue producto de un esfuerzo personal que lo llevó a cursar estudios de maestría en literatura hispana y recibir enseñanzas y conocimientos de maestros de la jerarquía de Alfonso Reyes, Agustín Yáñez, Enrique Alatorre, Julio Torri y María del Carmen Milllán.
También fundo la revista “Cuadernos del Viento”, donde dio a conocer a tres jóvenes escritores talentosos que otros suplementos no tomaban en cuenta: José Agustín, Gustavo Sainz y Parménides García Saldaña. Faltaría mucho espacio para hablar de las aportaciones del maestro Batis a la cultura mexicana. Por ello su muerte es una gran pérdida para la República de las letras, como diría el lugar común. ¡Descanse en paz! Nuestra solidaridad para con su familia.