Muy contentos aparecieron ayer ante los reporteros el presidente electo, AMLO y el gobernador mexiquense AMM. Ambos tenía razón para ese optimismo: a Del Mazo debió satisfacerle el anuncio del tabasqueño de inversiones federales por 46 mil millones de pesos para gastar el próximo año; mientras López Obrador debe estar agradecido con los electores de la entidad, quienes le dieron 4 millones 400 mil sufragios el primero de julio y podrían ser la semilla para convertir al Edomex en el principal bastión electoral Morenista, junto con la capital del país, y la clave para la continuidad transexenal de su proyecto de nación.
