El Bayer Munich de Alemania y el París Saint Germain, de Francia, son poderosos por los grandes jugadores que han contratado en los últimos años. Dominan sus respectivas ligas (el Bayer anda mal por ahora), pero fracasan en la mayor competencia del fútbol europeo: la Champions. Por eso no debe extrañar que los clubes de otras naciones de balompié de menor jerarquía pierdan casi siempre y no pasen la fase de grupo. Ese es el caso del PSV Eindoven de Holanda, donde juegan los mexicanos Hirving Lozano y el “Guti” Gutiérrez. Es inalcanzable en la competencia doméstica, pero no puede con los grandes de Europa.