Hundió el Neoliberalismo en la Miseria a Campesinos, Pero Apoyó a las Transnacionales

307
0

*En 36 años se transfirió del campo a grandes empresas ingresos de productores rurales.

Campesinos mexiquenses confían en recibir mucho apoyo para producir: el neoliberalismo los abandonó y empobreció, denunciaron.

En los 36 años de gobiernos neoliberales las familias campesinas fueron hundidas en la miseria, por las políticas públicas excluyentes y favorecedoras del gran capital trasnacional y del país, al cual se le asignó cada año 90 por ciento del gasto público destinado a apoyar las actividades productivas rurales.

El campo fue abandonado en los últimos seis sexenios. A los productores medianos y pequeños sólo se les dio el 10 por ciento del gasto al sector. Como consecuencia de ello, hay miseria, caída de la producción y productividad, mientras las importaciones crecieron en forma exagerada, con la consiguiente salida de divisas y aumento de la dependencia alimentaria. Se importan 24 millones de toneladas de alimentos al año.

En una reunión de dirigentes campesinos efectuada en el Palacio Legislativo, con la participación de los diputados Max Correa Hernández, Margarito González Morales, Juan Pablo Villagómez Sánchez y Jorge García Sánchez y la presencia de más diputadas y diputados, se expuso este panorama y se expresó la confianza en un cambio positivo para el campo con la cuarta transformación.

Los precios de los productos agrícolas se desplomaron y quedaron sujetos no a las condiciones del mercado doméstico, sino a los índices de la Bolsa de Chicago, se destacó en una reunión de organizaciones de productores rurales del “Movimiento Campesino Plan de Ayala Siglo XXI” y diputados locales, efectuada en el Palacio Legislativo de esta capital del Estado, con la intervención de diputados locales.

No obstante, fue Everardo Lovera, líder de la Federación de Productores de Maíz del Estado de México (FPMEM), quien ilustró con mayores detalles la dimensión de las distintas modalidades de esa transferencia de dinero del campo a los intermediarios, acaparadores, grandes empresas procesadoras de alimentos y “coyotes”.

Comparó el precio del maíz con el del diesel de 1982 y de 2018. Preciso que en el primer año de referencia con un kilogramo del cereal podían comprarse tres litros de ese combustible, mientras ahora se requieren entre 6 y 7 kilogramos para adquirir ese mismo litro de diesel.

Con gráficas expuso que lo mismo pasa con el diferencial entre el precio del maíz y el de la tortilla, pues en 1982 un kilogramo de maíz se vendía en un peso con 26 centavos, mientras que el de tortilla era de un peso con 70 centavos, para un diferencia de 44 centavos (informó que con un kilogramo del cereal se produce 1.5 del alimento), mientras ahora el kilogramo del grano básico se vende en tres pesos con 75 centavos, pero el de la tortilla alcanza los 14 pesos en promedio, para una diferencia de más de diez pesos.

El maíz es muy barato, pero la tortilla muy cara, lo cual indica que esta situación afecta a productores y consumidores, y beneficia especialmente a acaparadores, intermediarios, industriales de la masa y la tortilla, pero más a las trasnacionales procesadoras de alimentos, cuyos productos son muy caros y causan problemas de salud como la diabetes, la obesidad y otros padecimientos.      

También se refirió al exagerado aumento en el precio de los insumos para la producción agrícola, lo que es inconveniente, porque por el empobrecimiento del suelo se necesita cada vez más fertilizantes para producir.

Artículo anteriorSimplificarán Reglas en Apoyo al Campo; Precios de Garantía al Maíz
Artículo siguienteCoordenadas Políticas – Macario Lozano – Seguridad a la Sociedad