*La Sala Regional Civil de Ecatepec confirmó la condena de un juzgado civil.

El periodista Huberto Padgett promovió un recurso de amparo con el fin de lograr la revocación de la confirmación de la sentencia condenatoria dictada por el juzgado tercero civil de Ecatepec, por parte de la Sala Regional Civil de esa ciudad.
Se trata del conflicto legal iniciado por el entonces gobernador Eruviel Ávila Villegas contra el comunicador, por lo que escribió en el libro “Los suspirantes 2018”, en el cual se presentaron los perfiles y semblanzas de quienes eran presuntos aspirantes a las candidaturas presidenciales de los partidos.
De acuerdo con lo informado por el periodista, a él le tocó examinar el caso del entonces gobernador mexiquense y presunto aspirante a la postulación del PRI a la presidencia de la República. En ese tiempo Ávila Villegas habló de que “no me encarto, ni me descarto”, cuando reporteros le preguntaron si buscaría la candidatura del PRI, por lo que se justificaba su inclusión en el libro coordinado por Jorge Zepeda Patterson.
En su texto sobre el ahora senador de lista, Padgett narró cuanto le reveló un informante respecto de una fiesta con bebidas alcohólicas, en la cual participaron menores de edad y a la que asistieron Ávila Villegas, entonces alcalde de Ecatepec, antes de ser gobernador, y el en ese tiempo obispo del lugar, Onésimo Cepeda.
El mandatario mexiquense consideró injurioso y calumnioso lo redactado por el periodista, y que “le causó grave daño moral”, por lo que antes de dejar el cargo presentó una demanda por la vía civil y exigió una reparación del daño por diez millones de pesos que, anticipó, serían donados para “atender a grupos vulnerables”.
Padgett desconfía de la justicia mexiquense, porque, aduce, el presidente del Poder Judicial del Estado, Sergio Medina Peñaloza, le debe la posición al demandante; y dos magistrados que confirmaron la condena fueron designados en el sexenio eruvielista.
En su recurso de amparo el periodista argumentó que el juzgado tercero civil de Ecatepec debió declararse incompetente, porque él tiene su domicilio en la Ciudad de México, no en Ecatepec, cuna de Ávila Villegas e insistió en que en su texto ejerció su libertad de expresión; además, el demandante no sufrió daño moral pues fue postulado por el PRI para una senaduría, posición que ocupa en estos momentos, lo cual no hubiese ocurrido de haber sufrido daño moral alguno.