Andrés Manuel López Obrador será criticado con fiereza por cualquier error que cometa, porque es puntero en las preferencias electorales y sus adversarios buscarán debilitarlo. Y si pueden frustrar sus posibilidades de triunfo, lo harán. Y es el PRI, por conducto de los columnistas propensos a adivinar los deseos del presidente Enrique Peña, quien más ataca al tabasqueño. Es evidente la intención de poner en contra del tres veces candidato presidencial a los militantes iniciales de Morena, con el argumento de estarle dando cabida en la lista de candidatos a muchos hasta hace poco rivales de la organización. Lo cierto es que el verdadero problema para Morena y su fundador y líder histórico es el riesgo de que muchos ingresen a sus filas para desviar su lucha y objetivos estratégicos, porque están convencidos de que obtendrán cargos de elección popular apoyados por esas siglas. No son minoría quienes se incorporaron a ese partido porque están confiados en que desde ahí contribuirán a cambiar el modelo económico nacional que ha empobrecido a decenas de millones de mexicanos y enriquecidos a una reducida pero poderosa minoría y propiciado niveles de corrupción e impunidad como nunca. No podemos saber qué pasará en la elección por la presidencia de la República, que por ahora parece estar escriturada para López Obrador, pero lo que sí es seguro es que el “efecto AMLO” conducirá al triunfo a muchos candidatos a senadores, diputados federales y locales, alcaldes y probablemente a gobernadores, incluyendo a los oportunistas…
El problema del deterioro ambiental debe interesarle a los candidatos presidenciales en las campañas. La situación es grave y desde las instituciones no se le busca solución de fondo. Lo peor es que en casos como en el Estado de México continúa el autoengaño que caracterizó a Eruviel Ávila Villegas. Es infantil sostener que se recuperan cada año 10 mil hectáreas de bosques. Nadie ha visto en el territorio estatal siquiera un superficie de 10 hectáreas ganada a la desertificación y erosión. La gente de Ávila, quienes dominan la difusión del Poder Ejecutivo, está engañando al gobernador Alfredo del Mazo Maza y hasta a Rafael Pacchiano, de Semarnat. No han resarcido, ni lo harán, la deforestación que ocasionó la construcción de la autopista La Marquesa-Lerma ni la del Tren Interurbano…
¿De verdad partidos y candidatos respetarán los topes de gastos de campaña? Tan sólo lo que se roban los organizadores de las campaña representa un gasto mayor a esos topes, según los enterados. Todavía ahora quienes en 2015 recibieron tarjetas con dinero a cambio de su voto se quejan de que se las “ordeñaron” quien sabe quién…
CONTRAOREJA: “La cosa con Trump es que Obama vino ya por lo único que le interesaba al capital mundial: las riquezas naturales y del subsuelo de México. Ya no necesita máscaras pues”. Sentencia de un observador neutral… CONTRAOREJA DOS: “Que la bandera de cabeza era un mensaje en código, puede ser mentira. Lo cierto es que no fue secreto, y llegó a todo el mundo”. Palabras de conspiracionistas… CONTRAOREJA TRES: “Llegó a sus manos una copia de los electores que apoyaron al candidato independiente en su estado, para su sorpresa su nombre figuraba allí con los datos de su credencial ‘pero esta vez ni me la pidieron, y la actualice cuando me cambié de casa, ¡eran los datos actuales!’, me dijo”. Comentario contraorejero puro y recontrasembrado…